IMPACTOS EN LA ENERGÍA Y EN EL MAR

IMPACTOS EN LA ENERGÍA Y EN EL MAR

IMPACTOS EN LA ENERGÍA Y EN EL MAR

Resumen

El documento se divide en dos partes: 

La primera de ellas, explora una de las “Fuerzas Estructurales” desarrolladas en el documento de “Tendencias Globales” que gira en torno al medio ambiente y su relación con la energía. El debate se centra en los compromisos que los Estados asumen con el fin de reducir las emisiones netas sobre los gases de efecto invernadero por medio de la aplicación de medidas de mitigación basadas en las transiciones hacia nuevas tecnologías, tomando como indicador de referencia el límite de temperatura global de 1,5°C. Este debate trasciende el planteado por el documento en torno a los cambios en “el consumo y en la producción de energía para que los países en desarrollo puedan hacer crecer sus economías sin compensar las reducciones de carbono de los países desarrollados” (2021: 30).

Como parte integral del análisis, hemos incorporado al documento una lectura particular de las estadísticas y los estudios demográficos como parte del desarrollo social, político, económico y estratégico. Recordemos que no hay existencia estatal sin un territorio, pero el mismo necesariamente debe estar compuesto por una población, sin la misma no existe posibilidad de defensa soberana, jurídica o castrense. Y el desarrollo de esta población, tanto política, social o económica determinarán la viabilidad y sostenibilidad de los Estados-Naciones.

En esa misma línea argumentativa, una segunda parte que analiza la redistribución del poder entre la República Popular de China (RPCH) y los Estados Unidos de América (EEUU) y que revaloriza la importancia del dominio de los mares y océanos para determinar el probable impacto de dichas Tendencias en el escenario Atlántico Sudoccidental y antártico en términos de cambio climático y gobernanza marítima, con vistas a los próximos diez años. El propósito de esta segunda parte es delinear un posible trazado de una estrategia marítima nacional como paliativo a los impactos. 

PRIMERA PARTE

La cuestión energética

A fines de octubre del corriente año se desarrollará la conferencia de las Naciones Unidas sobre el cambio climático (denominada comúnmente por sus siglas COP26 en Glasgow), en un contexto donde la energía representa el 73% de las emisiones globales, las actividades agrícolas el 18% y la actividad industrial el 5% cuya base de generación se sustenta en petróleo, gas natural y carbón (cerca del 80%). 

Gráfico 1: Generación de gases de efecto invernadero por actividad/ consumo de gas

Fuente: https://wriorg.s3.amazonaws.com/s3fs-public/world-greenhouse-gas-emissions-sankey -chart-2019_2.jpg  

Notas: El sector de la energía incluye el transporte, la electricidad y la calefacción, los edificios, la fabricación y la construcción, las emisiones fugitivas y la combustión de otros combustibles.

Los otros sectores principales que producen emisiones son la agricultura, como la ganadería y el cultivo de cultivos (5,8 GtCO 2 e, o 12%); procesos industriales de productos químicos, cemento y más (2,9 GtCO 2 e, o 5,9%); residuos, incluidos vertederos y aguas residuales (1,6 GtCO 2 e, o 3,3%); y uso de la tierra, cambio de uso de la tierra y silvicultura, como la deforestación (1,4 GtCO 2 e, o 2,8%). Dentro del sector de la energía, la generación de calor y electricidad es responsable de la mayoría de las emisiones (15,6 GtCO 2 e en 2018, o 31,9% de las emisiones totales de gases de efecto invernadero), seguida del transporte (6,9 GtCO 2 e en 2018, o 14,2% de las emisiones totales). y manufactura y construcción (6.2 GtCO 2 e, o 12.6% de las emisiones totales).

Ahora bien, las tendencias mundiales están siendo afectadas por fuerzas y procesos globales de significativa relevancia: una oferta de energía concentrada y una demanda que crece exponencialmente, lo cual condiciona la producción/generación,  acumulación/transporte, el dominio de nuevas tecnologías de “transición”, la gobernanza de los regímenes (energía, cambio climático, etc.) relacionando a los grandes consumidores de combustibles fósiles, aquellos que por su desarrollo requieren mayores volúmenes de energía (China, India, etc.) y aquellos países netamente dependientes.

A través de esta complejidad, resulta necesario destacar el concepto que aglutina todos estos argumentos que se abre camino entre ambas posturas considerando un incremento de la interdependencia entre el uso eficiente, la preservación del medio ambiente y la sostenibilidad en el tiempo (contemplando una mayor demanda): la seguridad energética

Por definición son pocos los países que tienen una matriz de seguridad energética basado en recursos propios, la gran mayoría se ve obligado a importar energía (Klare; 2009: 12) situación que incrementa su vulnerabilidad. Por lo tanto, qué estrategia de seguridad energética es posible implementar con miras al 2030 a fin de generar un desarrollo sostenible, dado que la energía en esta dinámica global es un “bien” que hay que producir, caracterizada por un mercado imperfecto, regido por monopolios/ oligopolios y cada vez más afectado por subsidios. Al analizar todos estos ejes conceptuales se observa:

  1. Una tendencia netamente cooperativista de carácter multilateral donde los países desarrollados ceden terreno en pos del medio ambiente sano y limpio permitiendo a los países menos desarrollados a incorporar tecnología; (ver caso de EEUU y China, por ejemplo)
  2. Un sistema de autoabastecimiento a través de políticas activas en torno al financiamiento, incorporación de tecnología etc. 
  3. Una visión neorrealista de seguridad energética que a través de asociaciones estratégicas adopte medidas tendientes a generar un desarrollo sostenido (de carácter bilateral/ regional/ local etc.).

En el S.XX existió un área de consenso general, donde las discusiones de seguridad energética estuvieron centradas principalmente en el suministro de la energía (Goldthau; 2010: 10), como consecuencia de ello, el acceso al recurso, el traslado y el abastecimiento de gas-petróleo eran objetivos estratégicos para la política exterior de los países desarrollados. En consecuencia, un objeto de competencia geopolítica, así los países centrales se aseguraban: 1) diversidad de oferentes y de rutas de suministro energético; 2) el establecimiento de vínculos estratégicos de aquellos países considerados de “tránsito” denominados como Oil Choke Point (puntos de estrangulamiento o cuellos de botellas) tales son los casos del Estrecho de Ormuz, o la relevancia geoestratégica de territorios que aseguran las vías de accesos a recursos por medio de la construcción de gasoductos-oleoductos.  

Hace treinta años, las economías avanzadas eran los principales importadores y consumidores de petróleo, de esta manera, defendían una posición equilibrada entre su seguridad energética y la seguridad de suministro concibiéndolos como conceptos indisociables. Así, su acción política internacional no solo se orientaba hacia una clara influencia en las instituciones internacionales, sino que también tenían una connotación geopolítica definida en áreas de influencia. No obstante, el nuevo posicionamiento de poderes emergentes ha modificado los conceptos tradicionales y la seguridad energética es cada vez más importante para los países desarrollados, extendiéndose a las economías emergentes que están incidiendo sobre el poder global presionando para crear nuevos espacios de maniobra, con opciones estratégicas diferenciales (de manera unilateral y/o multilateral) para hacer frente a la seguridad del suministro energético (Blázquez; 2012).

En el contexto actual, la seguridad energética y la seguridad del suministro son vitales para el desarrollo económico y social de los países. Sin embargo, el entorno económico y político que da forma al diseño de la seguridad energética ha cambiado mucho desde la primera crisis del petróleo (Blázquez; 2012).

Las economías emergentes de hoy son actores importantes desde el punto de vista de la demanda energética y, por lo tanto, cada vez más relevantes en el ejercicio de la seguridad energética:

  • El primer dilema para la gobernanza es que no se puede diseñar una arquitectura internacional sin la participación activa de estas economías: la relación directamente proporcional entre las tasas de crecimiento demográfico, crecimiento económico y los consumos en los niveles de energía. 
  • El petróleo es la principal fuente de energía del mundo, pero también la más vulnerable: (1) el petróleo es la energía que se comercializa con mayor intensidad en los mercados internacionales; (2) las reservas de petróleo se concentran geográficamente en sólo unos pocos países; y (3) el comercio de petróleo tiene que lidiar las limitaciones de los Oil Choke Point como el Estrecho de Ormuz y Malaca.

Un sector energético en rápido movimiento destaca la importancia de un enfoque amplio y dinámico a la seguridad energética. Los ataques en Arabia Saudita (2019), las crisis humanitarias y la pandemia SARS-CoV2 destacaron que los riesgos tradicionales a la seguridad energética no habían desaparecido, sino que se han multiplicado en términos de ciberseguridad, emergencias socio-sanitarias (endemias, pandemias, epidemias) y de las nuevas condiciones climáticas extremas (sequias, huracanes, etc.). Dichas consideraciones inciden en las nuevas matrices energéticas de “transición”, requiriendo un mayor control por parte de los gobiernos para 2030.

En resumen, las fluctuaciones en los precios internacionales, el creciente aumento en los niveles de demandas de los mercados emergentes, la inestabilidad política y de seguridad en los principales países productores, como así también los desafíos de la “transición energética”, el cambio climático, el dominio de nuevas tecnologías, redes inteligentes y nuevos espacios de gobernanza a nivel internacional, obliga a los países a desarrollar una política exterior activa y un rediseño de las políticas públicas de seguridad y defensa (de carácter interagencial) para el 2030.

  • La producción de shale gas de los Estados Unidos se mantiene pese al Covid, afectando la dinámica de los mercados globales, flujos comerciales y de seguridad. Por otro lado, el crecimiento anual de la producción estadounidense se desacelera a ritmo vertiginoso visto en los últimos años, según las estimaciones oficiales actualizadas de los recursos y de disponibilidad de petróleo, el escenario futuro 2030 refuerza a este país como un exportador de ambos combustibles (EIA; 2021).
  • Los EE. UU disputan espacios de poder con los productores tradicionales, tales como la (OPEP), la OPEP (+) y con las nuevas infraestructuras de gasoductos generadas por Rusia (que pese a las sanciones y limitaciones impuestas por la UE) son actores con amplias ventajas competitivas. 
  • Las nuevas capacidades de los oferentes provocan presiones sobre los ingresos por hidrocarburos de algunos de los principales productores (el foro de la OPEP +), destacando la necesidad de generar nuevas matrices para diversificar sus economías.
  • El mundo todavía depende en gran medida del suministro de petróleo del Medio Oriente. La región sigue siendo el mayor proveedor neto de petróleo del mercado mundial, así como un importante exportador de GNL. Esto significa que uno de las rutas comerciales más transitadas, el Estrecho de Ormuz, este enclave geográfico conserva su posición geoestratégica para comercio de energía, especialmente para países asiáticos como China, India, Japón y Corea, cuyas economías son dependientes de combustible importado.
  • La UE promueve políticas de diversificación para reducir la dependencia de gas ruso, pero esto significa incrementar las importaciones de gas de Argelia, Egipto y Kazajistán entre otros mercados. Si asume incorporar mayores niveles de GNL deben importarlo de Malasia o de Qatar (aquí suma una nueva variable geoestratégica, es decir, el distanciamiento de los centros de consumo vs centros de aprovisionamiento).
  • Proyectando el escenario de políticas actuales, para el 2030 el 80% del comercio internacional de petróleo tendrá como destino final el continente asiático, impulsado en gran parte por una duplicación de las necesidades de importación de energía de la India y China (EIA; 2020; 24).
  • Frente a la necesidad de energía, China ha acelerado la construcción de 18 reactores nucleares (The World Nuclear Industry; 2021: 71) contribuyendo a mejorar el abastecimiento de energía y reducir la dependencia de las centrales del carbón para la generación electricidad (mayores generadoras de gases de efecto invernadero). Cabe destacar, que esta decisión se debe a que China ha declarado ser carbón neutral para 2060 (aun no puede compensar la demanda de energía) y que el principal proveedor de Carbón es Australia (país que ha formalizado una alianza estratégica AUKUS).  

S.XXI ciclo de transición energética

La seguridad energética es entendida como la disponibilidad de fuentes energéticas adecuadas, confiables y a precios accesibles para satisfacer la demanda y alimentar el crecimiento económico (Kohl; 2008: 10). Aquí cobra una nueva relevancia estratégica que gira en torno a cómo será producida la energía y cómo influye dentro de una región en la redefinición de las relaciones políticas y económicas con otros Estados. Estos conceptos tienen una connotación geopolítica que determina como será asegurado el abastecimiento energético, si se toma como referencia los ODS este debe ser confiable, seguro y sostenible (ya no solo con fuentes de gas y petróleo sino una matriz diversificada en base a energías limpias). 

Este nuevo escenario marca los siguientes desafíos para el 2030: 

  • La demanda total de combustibles fósiles se crece exponencialmente a corto plazo (EIA; 2021). Sin embargo, también es notablemente más bajo después de 2030, con una considerable desaceleración de la demanda agregada y luego cae ligeramente para 2050 (ver cuadro a continuación).
  • La demanda de gas natural es alrededor de 600 mil millones de metros cúbicos (bcm) (o un 10%) más baja en 2050, reflejando principalmente un menor consumo proyectado en el sector de energía e industria en economías de mercados emergentes y en los desarrollos en Asia. 
  • El uso de carbón se recupera más rápidamente a corto plazo y se mantiene por encima del año pasado pero las proyecciones 2030 destacan su tendencia a la baja mucho más rápido con posterioridad al 2025.
  • Las emisiones totales de CO2 son alrededor de 2 Gt más bajas para 2050. La diferencia en la caída está en el sector eléctrico, donde las emisiones están por debajo del 25% entre 2020 y 2050 (en comparación con una disminución de menos del 10% en el WEO-2020). La generación a partir de energía solar fotovoltaica (PV) y eólica en 2050 está alrededor 15% y 20% respectivamente más altos según el informe consultado.

Gráfico 2: Demanda de petróleo, gas natural y carbón en las Políticas declaradas (Escenario STEPS).

  • Una nueva política de transición, es decir, las acciones que llevan a cabo los gobiernos para ir abandonando el consumo de fuentes fósiles por sobre aquellas que no generan impacto negativo sobre el ambiente (gases de efecto invernadero), principalmente en la generación de energía eléctrica, para la producción industrial y de logística (transporte).
  • Tecnología innovadora aplicada a la producción de energía limpia (quien posee la tecnología para producir la energía y cómo se financian países), cobra un valor significativo los minerales críticos/estratégicos.
  • Si bien existen fuentes limpias generadoras de energía (eólica, solar), estas tienen limitaciones en torno a la escala, por lo tanto, la problemática es el rol del almacenamiento masivo.
  • La pandemia retraso la continuidad de los planes operativos de la reconversión de los sistemas energéticos de transición: 1) la necesidad de seguridad eléctrica sostenible y 2) las nuevas políticas de transición de energía en la generación de tecnologías innovadoras que fortalezcan la recuperación económica (IEA; 2021). 
  • No existe una única estrategia de desarrollo en las energías de transición (IEA; 2021 y Net ZERO By 2050; 2021), de esta manera los gobiernos promueven políticas activas con el fin de estructurar un futuro energético que incorpore las condiciones marco para canalizar inversión, apoyar la innovación, ampliar los espacios regulatorios, consolidar los objetivos de corto, mediano y largo plazo. Todos los países parten de distintos niveles de desarrollo. 
  • Las fuentes alternativas de generación energética (de transición: eólica, geotérmica, solar, biogás etc.), si bien reducen la dependencia de los combustibles fósiles aun poseen limitaciones respecto de la escala, intermitencia, costos y la incorporación de minerales estratégicos para la producción de equipos (de ahí el principal desafío es el tecnológico). La energía hidroeléctrica es una solución a los problemas de escala, pero genera un nuevo cuestionamiento sobre: 1) la cooperación entre los países (por ejemplo: crisis en la región de Tigray por el manejo del Nilo azul); 2) el impacto sobre el medio ambiente reforzado por las grandes acumulaciones de agua; 3) el desplazamiento y consolidación de nuevas fronteras productivas agrícolas (inundar campos etc.); 4) crecientes inversiones en la construcción y distribución de la energía generada.
  • La energía nuclear requiere elevados niveles de desarrollo tecnológico, de seguridad, costos (inversión de implementación, mantenimiento etc.) y de capital, pero resulta ser una de las fuentes que mayor nivel de compensación tiene respecto de la energía fósil en términos de escala.

Desde las perspectivas reseñadas, el periodo 2020/2021 marcó un hito histórico muy importante para el sector, producto de los mecanismos implementados para contener y mitigar la propagación del SARS- CoV2 las economías sufrieron importantes caídas en su capacidad productiva. Pese a esto, en el mundo se evidenciaron récords de ventas de vehículos eléctricos, un crecimiento sostenido en energías renovables como la eólica y la solar, determinando las bases para una nueva economía energética motivada por: 1) acciones políticas, 2) nuevos fomentos a la innovación tecnológica como pilares para promover acciones tendientes a la disminución del cambio climático. 

La tendencia para el 2030 es que estas dinámicas se refuercen mutuamente, plateando un camino hacia la consolidación de nuevos esquemas productivos cuyo protagonista es la “Energía Eléctrica”. El principal desafío que tienen los países es ampliar la utilización de este tipo de energías para suplir las necesidades diarias de carácter masivo (movilidad, calefacción, iluminación, etc.) y desplazar el consumo de hidrocarburos solo a la producción industrial (en una primera etapa). Se observan los siguientes fenómenos: 

  1. Mayores niveles de participación de la energía eléctrica
  2. El aumento en la demanda de electricidad requiere la integración productiva y financiera respecto de la generación de energía, no son criterios excluyentes. 
  3. La diversificación (nuclear, geotérmica, hidroeléctrica, solar, eólica, entre otras) en la generación de energía (estable, confiable, sostenible).

La seguridad energética establece el marco de referencia para generar la confiabilidad y la accesibilidad de la electricidad transformándose en una de las claves estratégicas para el futuro desarrollo y bienestar de los Estados. El IEA construye el análisis de un escenario de emisiones cero para 2050 con una proyección basada en incrementos del PBI mundial alrededor de un 40% entre 2020 y 2030, pero la oferta de energía total cae alrededor de un 7% (EIA; 2021).

Los mayores niveles de consumo de energía eléctrica y su extensión hacia los usos finales sumado al desarrollo de tecnologías más eficientes marca el rumbo de un cambio en el comportamiento de consumo. Así las transiciones energéticas tienen impacto directo sobre cuestiones sociales y económicas en individuos y comunidades. La dinámica de cambio está en identificar a las personas como participantes activos.

En este orden de ideas, el informe (EIA; 2021: 110) argumenta que las fuentes de emisiones de suministro de energía crecen en dos tercios entre 2020 y 2030, expandiéndose la energía solar, eólica, mientras que la energía hidroeléctrica y nuclear también contribuyen a la diversificación de la matriz productiva. Hoy en día, aproximadamente una cuarta parte del suministro total de energía proviene de fuentes fósiles o basadas en emisiones de gases de efecto invernadero y esto se reduce alrededor de la mitad para 2030 según las proyecciones del citado informe (EIA; 2021; 111).

Gráfico 3: Transición en el suministro total de energía mundial por fuente hasta 2030 (según las proyecciones realizadas por el escenario NZE 2050).

Nota: Otras energías renovables incluyen la energía marina y geotérmica. La bioenergía moderna incluye biomasa, biocombustibles líquidos y biogás derivados de fuentes sostenibles; excluye el uso tradicional de biomasa. El carbón, el petróleo y el gas natural de bajas emisiones incluyen la combustión de combustible equipada con captura, almacenamiento y uso del carbono (CCUS por sus siglas en ingles), así como los combustibles fósiles utilizados con fines no energéticos. No se informa el uso de residuos no renovables. 

El gráfico 3 relaciona el crecimiento del suministro de energía de bajas emisiones de gases de efecto invernadero (energía limpia) con una sostenida disminución en la demanda de los combustibles fósiles. Asimismo, se observa una caída abrupta en torno al consumo de carbón que se posiciona, aproximadamente, en torno al 50%. En el periodo analizado, estas caídas representan 2.500 millones de toneladas equivalentes de carbón (Mtce). El petróleo inicialmente rebota desde el mínimo nivel visto en 2020, pero pronto comienza a disminuir y cae a 72 millones de barriles por día (mb / d) en 2030 (EIA; 2021; 113). 

Sin embargo, al analizar la oferta, se observa que la generación de energía eléctrica crece a ritmos sostenidos para el 2030. Si bien el gráfico evidencia a simple vista que los cambios no son sustantivos, la principal conclusión que se puede obtener de él es que dichos cambios implican una alta tasa de cambios en el stock mundial de los equipos que los consumidores adquieren (vehículos, electrodomésticos, etc.).

Gráfico 4: Media de la inversión energética anual 2016-2020 (según las proyecciones realizadas por el escenario NZE 2050)

Nota: La infraestructura energética incluye las redes eléctricas, sistemas de cargas de vehículos y almacenamiento de CO2. Las categorías de edificios, transporte e industria incluyen inversiones en aplicaciones de eficiencia energética, sistemas eléctricos y uso final para combustibles de bajas emisiones.

Para 2030, la gran mayoría de las inversiones se destinarán a tecnologías de transición, de las cuales una gran proporción se focaliza en generación con una inversión anual total de alrededor de USD 0,5 billones en los últimos cinco años a casi USD 1,7 billones en 2030. El gráfico 4 define las proyecciones de los niveles incrementales de inversión para alcanzar los objetivos de disminución de emisión de los gases que producen el efecto invernadero. 

Asimismo, el gasto de capital total del sector energético aumenta alrededor del 2,5% del PIB anual en los últimos años hasta llegar al 4,5% del PIB en 2030 y luego tiene una tendencia a la baja del 2,5% en 2050 (EIA; 2021; 113). En contraste, el récord de inversión en el suministro de combustibles fósiles fue de USD 1,2 billones en 2014, mientras que las proyecciones en inversión en energía y en la infraestructura respectiva, aumenta de alrededor de USD 0,4 billones a más de USD 0,9 billones en 2030.

Según esta tendencia, el grafico 5, ejemplifica el crecimiento de tecnologías claves para la generación de energía eólica y solar, la venta masiva de autos eléctricos, entre otros datos destacables. La política de distribución de equipos sustentables requiere del compromiso ciudadano, dado que la tecnología limpia es distribuida afectando la forma en la que se desenvuelve la sociedad, destacando nuevos hábitos de consumo, las distintas formas de traslados, el cambio de las actividades diarias e incluso como se planificaran las ciudades (estaciones de recarga, tendidos eléctricos, nuevos materiales conductores, etc.).

Gráfico 5: Incremento de las Tecnologías claves 2030 (Net ZERO By 2050; 2021: 15).

Aunque las medidas anteriormente definidas parecen extemporáneas, son cambios que vienen aparejados con la “transición energética” y solo pueden ser incorporadas a través de decisiones gubernamentales rentables, transparentes y de acceso equitativo para gestionarse con éxito. Los gobiernos naciones deben garantizar el acceso de energía limpia centrado en cada uno de los ciudadanos a través de mecanismos de accesos a electrodomésticos eficientes, nuevos procesos industriales, la implementación de energías sostenibles en los hogares, el aumento en las economías de mercado para extender el acceso a servicios modernos entre otros. Estas medidas solo pueden ser gestionadas por medio de la adecuación de políticas públicas que sean facilitadoras de tecnología que incluyan entre otras cosas, créditos fiscales (desde la oferta y la demanda), prestamos, subsidios a empresas estratégicas. (Net ZERO By 2050; 2021)

La energía de transición representa nuevos desafíos para los Estados y para las empresas que verán reconvertido sus negocios, marcos productivos, transferencias de tecnología, niveles de inversión, profesionalización de los recursos humanos, regímenes legales, entre otros. Para 2030, la potencial producción de electrodomésticos, vehículos, nuevos tipos de combustibles (almacenamiento, distribución, etc.), nuevos sistemas constructivos, investigación y desarrollo (I&D) incorporarán cerca de 16 millones de trabajadores (Net ZERO By 2050; 2021: 16). Esta es una reconversión que será paulatina a medida que los niveles de producción de combustibles fósiles y/o sus derivados disminuyan promoviendo la transferencia de mano de obra, nuevas cualificaciones laborales que, sin duda, referirá a un nuevo debate en torno a los sistemas de formación y de empleo. 

Más allá de las nuevas categorías que sustentan la seguridad energética con base de generación eléctrica y la contracción en la producción del petróleo y gas tendrá efectos de singular relevancia en Estados y empresas. Tal como arriba se describió son mercados muy pequeños y concentrados. En el caso de los hidrocarburos, la participación de la OPEP en el suministro de petróleo aumenta de alrededor del 37% en los últimos años al 52% en 2050, definiendo un nuevo pico que en cualquier momento de la historia de los mercados petroleros (Net ZERO By 2050; 2021: 23).

En contraste, el ingreso anual per cápita del petróleo y el gas natural en las economías productoras cae alrededor del 75%, de USD 1800 en los últimos años a USD 450 en el 2030, lo que podría tener repercusiones sociales. Todo ello implica una fuerza de cambio en el seno de los países productores, en este sentido, a modo de ejemplo: el Reino de Bahréin viene desarrollando un programa de reconversión de la capacidad productiva promoviendo el desarrollo económico. Dicha iniciativa se vio favorecida por los precios en del crudo internacional y por la crisis de 2011 que se extendió a todos los países de medio oriente “Primavera árabe”. 

Otra de las dimensiones que refiere la seguridad energética, es que los nuevos procesos productivos requieren cantidades muy importantes de minerales críticos y su demanda aumenta proporcionalmente. El mercado de minerales críticos tiene como protagonistas metales como el cobre, cobalto, manganeso y varios metales de tierras raras y su proyección de crecimiento es de casi siete veces entre 2020 y 2030. Los ingresos de esos minerales son mayores que los ingresos de carbón mucho antes de 2030. 

De acuerdo con esta situación, se crean nuevas oportunidades para las empresas mineras, como también para aquellas que transforman la materia prima en los diferentes eslabones de la cadena de valor. Todo ello, genera una nueva dimensión geopolítica mediante los desafíos planteados por la seguridad energética que incluye la volatilidad de los precios, los costos asociados a las transiciones energéticas, inversiones en torno a la nueva disponibilidad de I+D, o nuevos cuestionamientos acerca de si la oferta puede o no seguir el ritmo de la creciente demanda. En este contexto, el gráfico 6 contrasta los suministros de petróleo y de minerales críticos respecto de la injerencia que tienen en la generación de energía eléctrica (solar y fotovoltaica) sumamente necesario para la producción de baterías, equipos, instalaciones eléctricas, servicios energéticos, redes, etc. 

Gráfico 6: indicadores de seguridad energética (Net ZERO By 2050; 2021: 24).

Minerales Críticos

En los patrones observados en el siglo XX, producto de los desequilibrios entre la oferta y la demanda de minerales eran compensados con incrementos de los recursos financieros, materiales sustitutivos, nuevos desarrollos tecnológicos y hasta con áreas de influencia o intervención incidiendo sobre las variaciones de los precios: acciones que justificaban la seguridad energética de un Estado. 

Desde 2016, la inversión global en el sector energético ha sido consistentemente más alta que en el petróleo y suministro de gas. Cuanto más rápido avanzan las transiciones de energía limpia, más amplia se vuelve esta brecha, y como resultado, la electricidad se convierte en el escenario central de las transacciones financieras relacionadas con la energía. 

La nueva dinámica que encierra a los minerales estratégicos se disocia cada vez más del sistema de energía intensivo en combustibles fósiles, al mismo tiempo, que se centra en la disponibilidad de los materiales y de la tecnología en ellos aplicada. Dicho cambio, además se ve fuertemente influenciado por las nuevas demandas de productos que se integran a una nueva matriz de consumo (desde una perspectiva micro). Esto tiene efectos directos en las estrategias de desarrollo de cada país, si bien un sistema de generación basado en paneles fotovoltaicos y la distribución de parques eólicos no requieren de combustible para funcionar, son propensos insumir grandes cantidades de recursos para su construcción y posterior operación (desde una perspectiva global/macro). 

A medida que se incrementa la demanda de energía limpia se intensifica la competencia por los materiales, el gráfico 7 es ejemplificador en este sentido. Un dato relevante es que la producción y puesta en operación de un auto eléctrico insume más de 200 kg de metales destacándose por ejemplo el Níquel, Cobre, Manganeso y Litio entre otros, mientras que un auto convencional consume alrededor de 50 kg. Sumado a ello, un parque eólico requiere 9 veces más recursos que una planta de gas de la misma capacidad de generación. 

Estas proporciones de materiales críticos pueden variar en su combinación dependiendo del tipo de tecnología que se aplique. El Litio es un recurso sumamente importante para el desarrollo de baterías y acumuladores en los tiempos que corren, pero a medida que se intensifique el uso de energías limpias, estos también se verán limitados y reemplazos por materiales más aptos para suplir las necesidades energéticas crecientes como súper conductores (grafeno) o nuevos sistemas de acumulación. 

Gráfico 7: El rápido despliegue de tecnologías de energía limpia como parte de las transiciones energéticas implica un aumento significativo de la demanda de minerales (The Role of Critical Minerals in Clean Energy Transitions; 2021: 6).

Nota: kg = kilogramo; MW = megavatio. Los valores para vehículos son para todo el vehículo, incluidas baterías, motores y planeador. Las intensidades para un coche eléctrico se basan en un cátodo 622 NMC (níquel-manganeso-cobalto) de 75 kWh y un ánodo a base de grafito. Los valores de la energía eólica marina y terrestre se basan en sistema de generador síncrono de imán permanente de accionamiento directo (incluidos los cables de matriz) y el sistema de generador de inducción de doble alimentación, respectivamente. Los valores para el carbón y el gas natural se basan en plantas ultra-supercríticas y turbinas de gas de ciclo combinado. El consumo real puede variar según el proyecto según la tecnología elección, tamaño del proyecto y entorno de instalación. 

La minería tiene un rol estratégico en la generación de energía renovable, por ejemplo: un aerogenerador integra carbón, plomo, litio, níquel, cobre, hierro y aluminio entre otros minerales. Asimismo, se requiere gran cantidad de cobre y aluminio para las redes eléctricas y, por último, el cobre es indispensable para todas las actividades relacionadas con conducción de electricidad, según la disponibilidad de tecnología actual. Los sectores eólicos y solares son grandes demandantes de minerales destacando aún más su vínculo con el desarrollo de tecnología limpia. 

Actualmente, el nivel de desarrollo tecnológico, la paulatina extensión de energías limpias y los planes de estímulo para inversiones (I+D, nuevos desarrollos científicos, etc.) no cumplen con la demanda que se requiere para transformar el sector energético (en términos de las obligaciones internacionales que convergen paulatinamente a las reducciones de emisiones de gases de efecto invernadero), tendencia que en el corto plazo implica aumentos de costos de las “transiciones” y una demora en el cambio en la matriz energética. Tal como se pudo observar en la sección anterior, la perspectiva es auspiciosa respecto del aumento de la demanda en minerales, lo cual plantea grandes desafíos que giran en torno a la disponibilidad y accesibilidad para asegurar el suministro eléctrico. 

En el caso de las baterías de iones de litio, la intensa competencia es recurrente en el mercado, la sustentabilidad de los proyectos queda supeditada a la curva de aprendizaje tecnológico que afecte sensiblemente los costos y que estos tengan un correlato en economías de escala para la continuidad en la producción. El litio ha ganado espacio en electrodomésticos masivos, pc y equipos tecnológicos; dicha masividad, además de contribuir al medio ambiente a través de la concientización, contribuye a la caída de precios. Esto implica que los costos de los minerales como materia prima es mayor en proporción al costo total de la batería, lo que representa en algunos casos 50-70% del costo total de la batería frente al 40-50%, hace cinco años. 

Los precios de los minerales podrían tener un efecto significativo en el producto final, así una duplicación de los precios del litio o níquel inducirían un aumento del 6% en los costos totales de las baterías (The Role of Critical Minerals in Clean Energy Transitions; 2021:12). Los ciclos de los minerales estratégicos responden a niveles de sensibilidad muy alto. 

Asimismo, la sensibilidad en los ciclos de desarrollos de los minerales crea oportunidades únicas, pero también importantes desafíos. Si los elementos que componen los materiales son modificados y/o reemplazados como producto de “la transición energética”, o se mejoran los procesos de reciclado, las tasas de recuperación o se extiende la curva de posibilidades de producción permitiendo la explotación en condiciones no previstas e incluso contemplando escasez de suministro como ocurre en tierras raras (neodimio), toda la cadena productiva y de consumo (independientemente si son Estados, Empresas, Particulares) deben tener la capacidad de absorber esta dinámica. 

Una característica fundamental del presente escenario de minerales críticos es consistente con los objetivos climáticos comprometidos por los Estados, que de forma gradual se insertan en la cadena de valor cumpliendo con las expectativas de abastecimiento con proyección al 2030. Son mercados que no están preparados para soportar transiciones energéticas aceleradas, debido a: 

  • Concentración geográfica de minerales: el primer nivel de concentración esta dado la geolocalización de los minerales, a diferencia del gas o el petróleo. Por ejemplo: El Coltán es un mineral compuesto de columbita-tantalita, sus mayores concentraciones (cerca del 80% de las reservas) se encuentran en África Central. La columbita es el mineral de columbio, también conocido como niobio. La tantalita es la fuente del tantalio metálico. El tantalio es un metal conductor de calor y electricidad altamente maleable y resistente a la corrosión. Es un componente clave en los productos electrónicos, especialmente los condensadores (dispositivos que almacenan y regulan, o amortiguan, cargas eléctricas) que se utilizan en teléfonos móviles y electrónica de automóviles, computadoras, cámaras digitales y otros dispositivos electrónicos. También se utiliza para crear aleaciones de carburo en metales duros para su uso en herramientas de corte y en otras aplicaciones industriales. La República Democrática del Congo (RDC) y la República Popular China (China) fueron responsables de alrededor del 70% y 60% de la producción mundial de elementos de cobalto y tierras raras respectivamente en 2019 (EIA; 2019). 

En 2020 las reversas de Litio a nivel mundial sumaban 80 mn de toneladas métricas (U.S.G Geological Service), dentro de los cuales, tan solo cinco países concentran la mayor cantidad, a saber: Bolivia, Chile, Argentina, Estados Unidos y Australia. Aunque, también existen recursos en Afganistán, China, Canadá y Mongolia (Christmann et al., 2015). Dentro del primer grupo, la mayor parte de estas reservas se encuentran en salares de “cuenca cerrada” siendo las más relevantes en extensión la de Bolivia, Chile y Argentina que concentran el 80 % total de las reservas mundiales. 

La segunda fuente rica en Litio son las “pegmatitas” (LCT) que materializan el 20% de las reservas totales que se encuentran en Australia, Zimbabue, Brasil, China y Portugal. Aunque se han relevado la existencia de recursos de pegmatitas en otros países, como, por ejemplo: Afganistán, Austria, Canadá, República Democrática del Congo, Finlandia, Irlanda, Rusia, España, Estados Unidos, y Uzbekistán (Christmann et al., 2015), que aún no han sido explotadas en su totalidad. 

Ante estas determinaciones geográficas, hay que considerar, a la demanda global de carbonato de Litio, en 2020 fue de 58.800 tn, con una tasa de crecimiento anual compuesta (CARG) de alrededor de 25,5% respecto igual periodo del año anterior, a un valor de 10.400/10.900 U$S/t. El aumento en el consumo de dicho mineral se asocia a la fabricación de baterías de vehículos eléctricos con una proyección de demanda que se verá fuertemente incrementada en un futuro cercano. En algunos casos, un único país es responsable de alrededor de la mitad de la producción mundial. 

En segundo lugar, se observan las operaciones de procesamiento, donde China tiene una fuerte presencia en todos los ámbitos. La participación de China en el refinado es de alrededor del 35% para níquel, 50-70% para litio y cobalto, y casi 90% para minerales de tierras raras, realizando inversiones muy importantes en Australia, Chile, la República Democrática del Congo e Indonesia marcando una tendencia. 

Los niveles de concentración de minerales acarrean dificultades para el abastecimiento de las cadenas de valor, debido a las crisis internas, interrupciones en la producción, restricciones comerciales y nuevos desarrollos tecnológicos. El mejor ejemplo, es el conflicto del Coltán en la República Democrática del Congo (debilidad institucional estatal, conflictos sobre la propiedad de la tierra, guerras sobre identidades étnicas no resueltas genera que se desconozcan los liderazgos tribales, entre otros). 

Entre otros minerales estratégicos se encuentra el uranio, si bien su mercado es más chico y concentrado, las cantidades de recursos minerales son mayores de lo que se percibe comúnmente y están relacionadas tanto con los precios de mercado como con el costo de extracción. Sumado, a que su producción aumentó al menos una cuarta parte en la última década debido a la exploración minera, el mundo consume alrededor de 62,496 para generar 353,812 Mwe y continúan ampliándose debido a los nuevos emprendimientos energéticos. 

Finalmente, el comportamiento de los minerales estratégicos se destaca por: 1) altos niveles de concentración, 2) cadenas de suministro y de producción complejas, 3) son sensibles a volatilidades de precios y a riesgos que podrían surgir de interrupción física, 4) son alcanzados por restricciones comerciales u otros desarrollos en principales países productores. El grafico 8 ejemplifica la gran diversidad de estos minerales. 

  • Proyectos de desarrollo a mediano y largo plazo: Dadas las particularidades del mercado y de los minerales el promedio de generar la explotación minera (descubrimiento hasta la primera producción) lleva alrededor de 16 años (The Role of Critical Minerals in Clean Energy Transitions; 2021). Dicho proceso crea incertidumbre respecto de la capacidad de proveedores para aumentar la producción en caso que la demanda se dispare rápidamente. 
  • Disminución de la calidad de los recursos: las preocupaciones se relacionan con la calidad y el esfuerzo que requiere su extracción. 
  • Mayores niveles de control en relación al desempeño ambiental y social: La producción y el procesamiento de recursos minerales da lugar a una variedad de problemas ambientales y sociales que, si no son debidamente gestionados, pueden afectar severamente a las comunidades locales e interrumpir su producción. Consumidores e inversores exigen cada vez más a las empresas que se abastezcan minerales que se producen de forma sostenible y responsable. 
  • Incremento de riesgos climáticos: las actividades mineras tienen un impacto nocivo sobre el medio ambiente, el litio y el cobre tienden a generar un impacto hídrico de magnitud considerable. La explotación de las tierras raras en África, China y Australia enfrenta elevados niveles de temperaturas e inundaciones que plantean mayores desafíos para garantizar suministro sostenible. Los formuladores de políticas públicas tienen que contemplar estas acciones con el fin de compensar los niveles de oferta de los minerales críticos y su nivel sostenibilidad ambiental para evaluar su continuidad.

Gráfico 8: La producción de muchos minerales de transición energética hoy en día está más concentrada geográficamente que la del petróleo o el gas natural (The Role of Critical Minerals in Clean Energy Transitions; 2021: 13)

Gobernanza energética 

La gobernanza es inherente a un proceso de participación que procura reunir los consensos necesarios para rediseñar el sistema internacional energético con miras al 2030. La producción de energía eléctrica muchas veces depende de los gobiernos locales (por la proximidad y geolocalización del recurso, aunque su distribución y consumo afecta a terceros Estados), emergen en este contexto muchos puntos de discrepancias respecto de regiones y luego a nivel global. 

El principal esfuerzo está en crear esquemas de cooperación que desarrollen una estructura que beneficie tanto a los países productores y/ o consumidores. La estrategia multilateral actual ha establecido regulaciones y mecanismos de compensaciones de carácter multi y bilateral, tendiendo a crear regímenes, foros y organismos con limitados poderes y eficacia, siendo el ejercicio de una hegemonía energética la principal fuente de mantenimiento-gestión evidenciando las estructuras y relaciones de poder subyacente, observando que: 

  1. La gobernanza energética es un bien público global y, por lo tanto, debe crear las condiciones para que sea sostenible en el largo plazo (Goldthau, 2012). Esta incluye alcances locales, regionales y globales que no solo afectan los objetivos de ODS (Transparente, sostenible, eficiente y accesible) sino que además lo Estados deben velar por la seguridad energética.
  2. La gobernanza energética es fragmentada y heterogénea, en términos institucionales y de política internacional (Keohane y David, 2011; Florini y Dubash, 2011), marcando los espacios comunes de grupos de consumidores (desarrollados, emergentes y dependientes) y productores en los distintos foros, organizaciones intergubernamentales cuyas problemáticas versan sobre cuestiones geopolíticas, de abastecimiento (transporte) y generación. 
  3. Crecientes demandas insatisfechas, aumento sostenible de consumos por parte de las economías emergentes (China e India), sumado a una renovada conciencia por el cuidado del ambiente en la generación de energía limpia, libre de emisiones de gases de efecto invernadero. Cada una de las organizaciones tiene agendas económicas, ambientales, sociales, políticas, institucionales, civiles, energéticos, tales como:
    1. La eficiencia energética (Agencia Internacional de Energías Renovables-IRENA-, Administración Nacional de la Atmosfera y los Océanos NOAR)
    2. Organismos que incorporan nuevos cuestionamientos: como la Alianza Mundial por el Suelo para la Seguridad Alimentaria y la Adaptación al Cambio Climático, así como la Mitigación de sus Efectos (GSP)
    3. Organizaciones intergubernamentales (Agencia Internacional de Energía, OPEP, OPEP (+), Organización de Organismos Árabes Exportadores de Petróleo), de estándares globales (Carta de los Recursos Naturales), Plataformas y Foros de diálogo (Foro Internacional de Energía), acuerdos diferenciados ( Alianza Internacional para la Cooperación en Eficiencia Energética, Foro de Países Exportadores de Gas.), y las iniciativas de la Organización de las Naciones Unidas (Organismo Internacional de Energía Atómica,  Energía Sostenible para Todos, Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático en 1992). 
    4. En una escala regional, se observan diferentes modelos de cooperación, por ejemplo, en la Comunidad Europea (Comunidad del Tratado de la Energía), y en América Latina y el Caribe (Organización Latinoamericana de Energía y PETROCARIBE)
    5. El G-8, un foro que incluye a la mayoría de los consumidores más importantes del mundo, pero también incluye a Rusia como un importante productor; 
    6. Los diversos grupos que representan el mundo régimen de cambio climático (sociedad civil transnacional, ONG, etc.); 
    7. Organismos del sistema económico-financiero internacional, CAF, BID, Banco Mundial, es decir, organismos internacionales que promueven recursos con la premisa de mejorar la eficiencia energética y acelerar las inversiones (Bonos Verdes) en energía limpia, principalmente en países consumidores del mundo en desarrollo. 

Esta heterogeneidad manifiesta un aumento entre la interdependencia de todos los actores que participan en la gobernanza, sugiriendo así un incremento en las necesidades y de seguridad de energética. Las principales restricciones que presenta el sistema de gobernanza actual están en la multiplicidad de organismos (con diferentes niveles de extensión y de temáticas) que tienden a funcionar como moderadoras entre un sistema de oferta concentrada, una creciente demanda y los impactos negativos sobre el medio ambiente-cambio climático, condicionada por las asimetrías de cada organismo a partir de una estructura de poder (creando nuevos espacios de dependencia). 

Dichos esquemas de cooperación interdependiente, además, tienen el desafío de crear nuevas oportunidades e integrarse a un mercado donde la tecnología limpia se convierte en un nueva e importante área de inversión y competencia internacional; países y empresas luchan por una posición en las cadenas de suministro globales. 

El contexto internacional ante la crisis del gas 

La crisis del gas surgida en el otoño boreal europeo, resulta de un hecho portador de futuro, que no fue atendida en relación a su importancia, dado que los acontecimientos que se desarrollan casi a diario en los mercados energéticos europeos a futuro debieron prever una acción conjunta estatal por parte de la UE; por el contrario Bruselas se ha manifestado en dos oportunidades que tanto la electricidad como el gas son mercados totalmente privados donde la UE no puede ni debe intervenir (liberalismo económico).

Los Protocolos de Kyoto (1997) y el Acuerdo de Paris (2016), sumado al accidente nuclear de la planta de Fukushima – Daiichi en 2011, fueron elementos determinantes para que la Unión Europea y el Reino Unido (secesionado de la UE el 29 de Enero de 2020 -Brexit-) apliquen de forma definitiva las recomendaciones propuestas por el informe de la Comisión de Investigación, Desarrollo Tecnológico y Energía (A4-0354/98), el Tratado EURATOM (2000) y el informe final del Libro Verde (2002) tendiente a generar “una estrategia europea de seguridad del abastecimiento energético”.

En dichos documentos se recomienda la suspensión de las actividades de las centrales atómicas de los países que conforman la Unión Europea (UE) particularmente, los de Europa Central y del Mediterráneo. Quedando como excepción Francia, que ha recurrido a la energía nuclear como principal insumo de su matriz energética en las últimas décadas. Como solución la UE y los participantes del Acuerdo de París han acordado sanciones por emisiones de CO2, comúnmente conocidos como derechos de emisión de CO2 o E.U. ETS (medida de multa por la emisión) que hoy supera los 64 Euros o 70 U$S, y con ello incrementan los costos de todos los combustibles fósiles y de las empresas productoras energías que dependen de dicha materia prima. 

Gráfico 9: Costo de Energía Vs Multas CO2 (Acuerdo de Paris).

Fuente: Trading Economics. Disponible en: https://tradingeconomics.com y https://tradingeconomics.com/euro-area/indicators 

Gráfico 10: La matriz energética europea y la proyección de demanda esperable para 2018

Fuente: AIE Agencia Internacional de la Energía. Disponible en: https://www.iea.org y en Biblioteca: https://www.iea.org/topics/energy-and-water

Tampoco ayudan a la presente crisis los precios del petróleo para la región, a lo que debemos sumarle los impuestos, que cada vez son más altos y siempre se vuelcan contra los combustibles fósiles en todas partes del mundo, pero en la Unión Europea, actualmente ascienden significativamente, sumado a ello los UE ETS (2 EUROS por litro de gasolina especial).

Fuente: ENERGY LIVE. Disponible en: https://www.energylive.cloud y  The World Nuclear Industry (2021) Status Report 2021. Texto disponible en: https://www.worldnuclearreport.org/

En este sentido, repercute efectivamente en los precios de la generación eléctrica, como se puede observar en los gráficos 9 y 10, respectivamente, según el tipo de combustible NO ecológico que se utilice en mayor proporción serán sus multas por UE ETS Acuerdo de Paris. El Mercado mayorista de producción eléctrica de la Unión no fue distinto en su balance, por el contrario, reaccionó más violentamente.

Fuente: OMIE. Disponible en: https://www.omie.es

Fuente: OMIE. Disponible en: https://www.omie.es/es/spot-hoy

Se infiere que esta crisis, que ha generado escases energética es consecuencia de decisiones desacertadas (que en su oportunidad fueron denunciadas tanto por EEUU como la FEDERACIÓN RUSA), y que desatendieron las realidades geopolíticas y geoeconómicas mundiales de ese entonces. La realidad indicaba la transición tecnológica de los combustibles fósiles a energías limpias, siendo la solución intermedia planteada, el uso del GAS, un recurso abundante solo en Rusia, el medio Oriente y Sudamérica. Asimismo, no se evaluaron correctamente los stocks de reservas conjuntamente con las magnitudes de la capacidad de producción. En efecto, ha tornado imprescindible la importación del citado recurso tal como lo demuestran las distintas fuentes de variables económicas.

Gráfico 11: Costo de la Energía en la Unión Europea.

Fuente: Bloomberg Goldman and Sachs Global Investment Research. Disponible en: https://www.goldmansachs.com/careers/divisions/global-investment-research/

Frente a estas condiciones, se ha sumado las caídas en a la producción de Gas Natural dentro del territorio europeo como producto de las dificultades generadas por las extracciones de gas de los Países Bajos, una de los mayores yacimientos europeos, que causaron graves perjuicios como producto del sistema de extracción del shale gas (bombeo de agua por intermedio del esquisto).

Fuente: I.C.E. (Informe de Coyuntura Energética). Disponible en: http://www.energyconsi lium.com/index.php?uri=ice

Asimismo, estas acciones incrementaron el nivel de vulnerabilidad de la UE que para afrontar la creciente demanda, impulsaron medidas que afectaron su seguridad energética importando GNC y GNL, lo cual redundo en mayor dependencia e incrementos de costos.

Fuente: Quarterly Report Energy on European Gas Market. Disponible en: https://www.europeangashub.com/report-presentation/quarterly-report-on-european-gas-markets-3

En este escenario Francia y Noruega son las excepciones, aunque Francia se destaca por haber recurrido a la energía nuclear más que cualquier otro país del mundo en las últimas décadas. Actualmente cuenta con 58 centrales eléctricas en funcionamiento y una en construcción. 

A ello debemos sumarle la flota naval atómica francesa, integrada con un portaviones clase Gral. J. De Gaulle con dos reactores Thompson, y diez submarinos atómicos tanto SSBN (misiles ICBM) como SSN (de ataque y control). La sumatoria de lo expuesto nos presenta un total de 70 reactores atómicos en uso y actividad

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Fuentes: Autoridad de seguridad Nuclear y Ministerio de Ecología de Francia. Disponible en: https://www.emol.com/noticias/Internacional/2018/11/28/928864/Donde-quedan-los-58-reactores-nucleares-de-Francia.html 

En 2019, Francia cubrió casi el 71% de sus necesidades de electricidad con energía nuclear. Las centrales tienen una edad media de 36 años, y el último reactor entró en funcionamiento en 1999. Además, es el mayor productor de energía nuclear del mundo y posee una de las mejores tecnologías en el reciclaje del combustible utilizado, siendo un elemento fundamental para el desarrollo del programa nucleas francés. Esta ventaja competitiva le permite erigirse como el único exportador de energía eléctrica de Europa. A ello debe sumarse que junto con el Reino Unido son las dos únicas potencias nucleares, que no integran el Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP – 1 de Julio de 1968).

Asimismo, el grupo estatal EDF (francés), está endeudado en 42.000 millones de euros y debe invertir unos 100.000 millones de aquí a 2030 para seguir explotando los reactores más antiguos. Francia aún no ha decidido si construirá nuevos reactores de energía nuclear. Esta decisión se ha pospuesto y la tomará el nuevo gobierno galo tras las próximas elecciones de 2022. 

Por su parte Noruega, en los últimos años, desarrolló su matriz energética en base exclusiva a los combustibles fósiles, aunque con una potencial reconversión en cuanto a nuevas formas de producción tendiente a la neutralidad del CO2. Por ello todos los pozos de extracción petrolera de Noruega que dejan de ser productivos se convierten en depósitos del CO2 que se bombea al mismo y se lo sella.

Fuente: Euroestat Disponible en: https://ec.europa.eu/eurostat/data/visualisation-tools y en https://ec.europa.eu/eurostat/cache/infographs/energy_monthly/enmonhly.html?geo=EU27 _2020&language=EN&detail=1&nrg_bal=EXP&unit=THS_T&siec=C0100&indic_nrg= nrg_cb_cosm&dataset=nrg_cb_pem_RW&chartOption=&time=&chart=&zoom =&start=&end=

Aun así, la situación de Noruega en esta materia, es sumamente compleja. Si bien aporta casi el 20% de su producción gasífera al Reino Unido y la UE, sus reservas bajan anualmente en forma alarmante, lo que hace suponer que en el mediano plazo solo le servirán para el autoabastecimiento.

Fuente: FX Empire: Market News & Forecast. Disponible en: https://www.fxempire.com. Actualización diaria disponible en:  https://www.fxempire.com/commodities/natural-gas (FREE EXAMPLE)

Mencionada la excepción a la regla Europea (la cual retomaremos por otro hecho portador de futuro), de diferentes formas, y a diferentes ritmos, los Estados miembros han comenzado aceleradamente el desmantelamiento del soporte atómico de sus naciones, haciendo hincapié en las naciones de Europa del Este (Hungría, los países Bálticos, Rep. Checa, Eslovaquia, Polonia, etc.), todos ellos con la inestable tecnología nuclear rusa; donde en particular se deben considerar en el análisis dos naciones, Alemania y el Reino Unido.

El caso paradigmático en esta cuestión es Alemania, que, siendo una exportadora de tecnología atómica, opta por deshacerse de ella, luego del evento de FUKUSHIMA. No se puede soslayar la dependencia económica respecto de la UE (que es su motor), como así de los financistas de origen austro-alemanes (los países bancarios integrados de Austria-Luxemburgo, Liechtenstein y Suiza), amén ello que Alemania es el estado pivote que articula claramente la geopolítica mundial hacia Rusia.

Sumado a ello, Alemania es la mayor exportadora de la producción y de tecnología de la Unión Europea no puede deshacerse del carbón debido a sus requerimientos energéticos que dependen fuertemente a su industria automotriz, naval, robótica, etc.

La Unión Europea, de esta forma desde 2011, por decisión unilateral forzada por los acontecimientos de Fukushima, se replanteó su estrategia energética, inspiradas en políticas de prevención de riesgos no ha generado alternativas claras, y sin previsiones por parte del protagonista estratégico del escenario, los EE.UU. El plan de emergencia, elaborado fue la conversión urgente a plantas productora de energía a GAS de petróleo, sea GNC o GNL o GLP, en base a una infraestructura materializada en gasoductos, o buques recalificadores y una progresiva suspensión de las centrales a carbón hacia 2038.

La respuesta para la transformación a Gas Comprimido y Licuado, no fue planificada por la UE donde los distintos socios optaron por diversas soluciones, todas ellas como lo demuestra el escenario de tendencia (ESCENARIO 2 MUNDO A LA DERIVA del doc. TG).

File:Major russian gas pipelines to europe.png

Para la década del 70 y 80, Alemania contaba con un plan de acercamiento entre la RDA-RDF y la ex URRS en la generación de infraestructura de gas, brindándole la posibilidad de acceso a gas ruso a toda Europa, esta acción beneficio a ambas partes. Por un lado, se generaron las condiciones de accesibilidad al recurso a Europa y por el otro, los rusos obtuvieron el know how para la construcción de gasoductos en forma gratuita – gas a Alemania por caños a la URSS -), este acuerdo, resistido por EE.UU., en particular por la Administración de Ford y de Nixon, dibujo un mapa nuevo energético en el continente. 

Es por ello, que tanto Dinamarca como Alemania plantearon de emergencia, dos proyectos. Un proyecto de Energía Eólica subsidiada instalados en el Báltico y en la Selva Negra Alemana (Westfalia) y un segundo proyecto que giraba en torno a la construcción de nuevos gasoductos.

Ya en 2004 se estaba en tratativas con el denominado North Transgas y Gasoducto europeo del Norte; también conocido como el Gasoducto Ruso-Alemán, Gasoducto del Mar Báltico; el 13 de octubre del 2005, el brazo de exportaciones de Gazprom, Gazprom Export, firmó un contrato con la empresa alemana de gas Wingas, una operación conjunta de Gazprom y Wintershall (filial de BASF – ALEMANIA), para suministrar 9 millones de m³ de gas natural al año durante 25 años, nacía de esta forma el NORD STREAM 1. 

https://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/thumb/5/58/Nordstream.png/400px-Nordstream.png

A su vez, el 16 de junio de 2006 Gazprom y la empresa danesa DONG Energy firmaron un contrato por 20 años para el suministro de 1 bcm de gas al año a Dinamarca, mientras que DONG Energy suministrará 0,6 millones de m³ de gas natural por año para la filial de Gazprom, Gazprom Marketing and Trading, en el Reino Unido.

El 1 de octubre de 2009 las empresas firmaron un contrato para duplicar el suministro a Dinamarca. El costo total de esta obra se estimó en nueve mil millones de euros (U$S 10 billons dollars).

Acaecida las circunstancias del apagón atómico europeo y sumado a las responsabilidades emergentes del Acuerdo de Paris, diversificar el sistema pareció en su momento lo más acorde a la realidad geopolítica, dado que aún estaba en el poder del Kremlin el Presidente Dmitri Medvédev (2008-2012), más eurocentrista y diplomático que su antecesor Vladimir Putin.

Nace entonces pues, el Nord Stream II, que posee dos tuberías de gas con una capacidad total de 55.000 millones de metros cúbicos por año desde la costa rusa a través del mar Báltico hasta Alemania, paralelo al Nord Stream 1, pero duplicando la provisión de gas tanto a Dinamarca y Alemania. El consorcio que construyó el Nord Stream 2, está formado por Gazprom junto a la empresa francesa Engie S.A., las alemanas Uniper y Wintershall, la austríaca OMV y la anglo-holandesa Shell. 

Fuente: Gazprom y ENTSOG. EUROSAT. ATLANTIC COUNCIL. Oxford University. Disponible en: https://ec.europa.eu/eurostat/data/visualisation-tools

Frente a las implicancias geopolíticas y geoeconómicas que representa el desarrollo energético de Rusia y sumado a la reelección del Presidente V. Putin (2012), los Estados Unidos imponen sanciones económicas a las empresas intervinientes en la construcción del mismo todas ellas a partir de la Administración de Donald Trump, alertado por el DoD. 

Sin embargo, las sanciones no tuvieron la repercusión que se esperaba dado que casi toda Europa, y el principal socio estratégico de los EEUU (Reino Unido) participaban en dicho proyecto y se favorecen del gas ruso. Por lo cual el 10 de septiembre de 2021 se terminó la construcción del Nord Stream 2 y se conectó el gasoducto a la estación de bombeo alemana y danesa, respectivamente. Con esto suponemos se precipitaron en forma inmediata cuatro cuestiones: 

Primera. Dinamarca se transforma directamente en “Exportadora” de GNL del gas natural ruso. Consecuentemente con ello, la principal compañía danesa de transporte marítimo MAERSK transforma gran parte de su flota a buques gaseros o regasificadores y suma una inversión directa para pasar a sus buques portacontenedores a metanol y a gas por valor de 1.400 millones de dólares. 

Además, Dinamarca se convierte junto con Alemania en los primeros exportadores y desarrolladores de equipos y turbinas eólicas de grandes dimensiones marinas y terrestres.

Segunda. Se transforma a la Federación Rusa en la nueva Arabia Saudita de Europa y con ello el dominio del mercado del GAS junto con QATAR.

Fuente ICE – DW  Disponible en: www.dw.de

Al contar con el transporte de 55.000 millones de metros cúbicos por año solo del Nord Stream 2, eso nos da MM BTU 1.978.417.266,18 por año,  tomando el valor volátil del MMBTU en U$S 5,94 nos está dado que por un solo gasoducto la Federación Rusa recibe algo así como U$S 333.066.880, a lo que debemos sumarle los otros seis gasoductos en operaciones (entre ellos el YAMAL), según el precio del gas Europa y otros socios dan anualmente 2 a 6 mil millones de dólares a la Federación Rusa, solo de transporte. La volatilidad del mercado condujo que el 15 de octubre de 2021 los 1000 m3 de gas natural cotizaron U$S 1920. Pero los valores del gas se disparan a diario, por lo cual la crisis europea se profundiza.

Fuente: Euroestat Disponible en: https://ec.europa.eu/eurostat/data /visualisa tion-tools y en https://ec.europa.eu/eurostat /cache /infographs /energymonthly /enmonthly .html? geo= EU27 _2020&language=EN&detail=1&nrg_bal=EXP&unit=THS_T&siec=C0100&indic_nrg=nrg_cb_cosm&dataset=nrg_cb_pem_RW&chartOption=&time=&chart=&zoom=&start=&end=

Fuente Thomson Reuters. https://graphics.reuters.com https://fingfx.thomsonreuters.com /gfx/editorcharts/USA-NATGAS-PRICE%20DECLINE/0H001QENT7RC/index.html y en Enlace dinámico de precios y mercados https://www.reuters.com/business/energy/us-natgas-track-highest-since-2008-global-prices-soar-2021-09-28/ 

En el mercado a Término del TTF de Países Bajos para toda la UE el precio del gas llegó el 7 de octubre de 2021 a U$S 1.200 en la previsión de los mercados a futuros, y U$S 620 para los 1000 M3 de GAS. Ante esta situación, Rusia domina el mercado con su poder blando. Y en base al precio actual, si el NORD STREAM 2 Bombeara su producción de GAS este representaría la suma de U$S 34.100.000.000 para el 2022; pero si se toma de referencia los futuros de U$S 1.200, la suma asciende a U$S sería de 660.000.000.000.

Dicho valor representa los ingresos de un solo gasoducto. Lo cual dejaría al gasoducto YAMAL (Ucrania y Polonia) como antieconómico y sumamente ineficiente.  Las muestras de las acciones del poder blando ruso se hacen sentir a diario, dada la falta de aprobación del Nord Stream 2 por parte de la Autoridad Europea y de Alemania, que exigen la venta del gasoducto a un tercero, de mantenerse esta posición es probable que ocurra una crisis energética en invierno. 

Existen condiciones objetivas para un nuevo Maidán, recordemos que en los años 2004 –Revolución Naranja–  y 2014 –Euromaidán– se produjeron una serie de manifestaciones pro europeístas y opositoras, donde la población se manifestó en forma de desobediencia civil, provocando la caída del gobierno pro ruso de Yanukovich.

Las actuales condiciones geopolíticas, con la invasión de Crimea, el separatismo pro ruso del Donetsk y Lugansk, la presión de la Unión Europea y la casi muy probable desconexión en 2024 (bajo las condiciones de contrato suscripto) del gasoducto YAMAL que transita por territorio ucraniano, más la presión de los ejercicios militares casi constantes de la OTAN y EEUU en este territorio, aseguran, que el invierno se puede producir un desabastecimiento de gas natural para Ucrania y toda Europa, y la negativa rusa de repotenciar o renovar el YAMAL, pueden dejar a la población de Europa del Este congelados como sucedió en 2014. En el caso de Polonia donde el YAMAL posee una desviación o ramificación cuyas clausulas vencen en 2023.

Por lo cual, la situación de la provisión de energía hacia esta zona causará graves problemas sociales y económicos. A diferencia de la crisis de 2014, los reservorios y/o acumulación de gas natural son escasos y hasta nulos, debido en gran parte que a consecuencia del fuerte verano europeo con temperaturas récord de 48.8° Celsius, dichas reservas fueron utilizadas para palear el exceso de demanda de energía eléctrica, dado que el verano de 2021 con poca actividad de vientos que dejan en evidencia la vulnerabilidad de los parques eólicos de España, Dinamarca, Francia y Alemania que vieron limitada la capacidad de generación de energía.

Asimismo, no se pueden soslayar los efectos acaecidos por la pandemia por el Covid 19, que, con poblaciones hastiadas y casi quebradas a nivel microeconómico, avizoran crisis económicas y políticas en toda Europa. 

Ahora bien, los mayores niveles de vulnerabilidad para la producción de energía eléctrica y su distribución son Portugal, Irlanda, Italia, Grecia y España (P.I.I.G.S.). Estas economías se encuentran en una progresiva recuperación, dado que han sufrido la crisis financiera de 2011 con una inusitada dureza, producto de la debilidad de sus mercados financieros y las limitaciones generadas por la deuda externa. 

Asimismo, su seguridad energética depende del suministro del gas por parte de Argelia a través del MEDGAZ – MAGREB que básicamente alimenta a los P.I.G.S. para sus suplir sus necesidades energéticas industriales y domésticas que tiene interrupciones por aumento de costos, conflictos políticos y la renegociación de los contratos de operación. Tal como se puede observar en los cuadros arriba citados el consumo supera los U$S 200 el Mw/h. Esta situación redunda inexorablemente en el aumento general de precios de los BTU.

Gas pipelines across Mediterranee and Sahara map-en.svg

Tercera. Las acciones de reemplazar el gas ruso o GN o GNC, por GLP o tanqueros regasificadores, como es el ejemplo de Polonia y España, han hecho inviables su operación y el mercado energético. El crecimiento del precio del GNL en los centros está haciendo subir el gas natural licuado y viceversa. Los precios spot del GNL en el norte de Asia se han elevado por encima de los US$ 20 por millón de BTU, ya que los compradores de la región compiten por los envíos disponibles. Este mercado a término está dominado por los Países Bajos.

Por lo cual la operatoria hace casi imposible competir contra los precios rusos del gasoducto. Más aun cuando a Alemania ha garantizado los U$S 4 por MM BTU o algo así de U$S 450 por 1000m3 de GNC. Dominado así el mercado pudiendo exportar sus excedentes al resto de la Unión Europea como hace Eslovenia para Ucrania y Georgia a fin de evitar los embargos de la Federación Rusa a dichos países.

El efecto fue inmediato, la crisis del gas ha provocado la crisis de precios en la generación de electricidad particularmente en Portugal, España, Grecia; Irlanda e Italia que pronto suspendieron la generación de energía por medio de plantas nucleares y no poseen centrales eléctricas de carbón en funcionamiento dependiendo únicamente de un gasoducto argelino de escaso volumen.

La crisis, que registra subidas de hasta 150 euros (U$S 200) de megavatio por hora de un día para otro; ha hecho que los españoles de más bajos recursos se iluminen a vela en las horas picos de consumo, usando electricidad solamente en horas de la madrugada cuando el consumo baja y tiene precios de subsidio. 

Pese a que España posee el mayor parque Eólico de Europa, con fuertes políticas de promoción y con subsidios estatales, no ha demostrado eficiencias en su uso y/o aporte al sistema interconectado, es más, graves fallas en las aspas de fibra de carbono han obligado a su reparación urgente si poder reciclar las mismas debido que son altamente contaminantes y cancerígenas.

Esta crisis no solo abarca a las naciones del mediterráneo, el Reino Unido comienza a sufrir sus efectos, dado que los consumidores británicos temen cortes de electricidad este invierno por la falta de provisión de gas de origen ruso, sumado a los cambios en la logística naval que se extendió los buques regasificadores cuyas empresas han sufrido quiebras, limitaciones en las operaciones como producto de la pandemia y el desguace de embarcaciones con el fin de evitar los déficits de las mismas.

A su vez, también se puede observar el fenómeno del BREXIT que acrecentó los inconvenientes en el aprovisionamiento de combustibles líquidos, por falta de transporte terrestre. 

Cuarta. Los resultados de las energías renovables en particular las eólicas y las solares han visto no solo una merma en su producción, sino que además el desencanto en su utilidad y eficiencia.

Con 6.056 MW instalados en España, que presuponen solo el 24% de la demanda de electricidad española, la ineficiencia ha demostrado claramente el síndrome “DON QUIXOTE” de la ingeniería de dicho país. 

Su corta vida operativa no solo provoca contaminación de ruido, sino de constantes explosiones de sus turbinas y la imposibilidad de reciclar sus palas cuando se rompen o deterioran. Es por ello que se lucha por repotenciar dichas usinas, pero con consecuencias ecológicas y económicas poco alentadoras.

La UE, prevé que 5400 aerogeneradores deben repotenciar, en toda Europa, y hay que renovar al menor todo el parque en 2030, el número de palas que se reciclan es por 3, y la única opción para su disposición final es enterrarlas. Los rellenos sanitarios son un grave problema no solo para la industria, sino que causa problemas serios con sus ciudadanos y las ONG ecológicas.

La vida de un aerogenerador no supera los 20 años frente a los 70 años que prevé un reactor Nuclear de ciclo CANDU, o PWR o de ciclo natural. No está más lejos ello los problemas que implican los campos solares. 

Los paneles solares son aún más ineficientes, solo basta ver que el último módulo ( de fabricación rusa NAUKA traducido sería “Ciencia”) de la estación espacial internacional, posee 13 m3 (14 metros lineales) de tamaño, que es alimentado por 56 m2 de paneles solares, debemos remarcar que, en el espacio los paneles no enfrentan la suciedad, ni el polvo, y que su eficiencia es al 100% pues son iluminados permanentemente por el Sol, sin interferencias atmosféricas de ningún tipo, de la simple ecuación vemos que la eficiencia para alimentar 1 m3 es necesario en un ambiente óptimo de 5 m2 de paneles solares, pasando a m2, la cuenta se reduce a 4 m2.

Los diferentes parques solares, instalados particularmente en Alemania, Chile, Argentina y China, nos indica que ninguno, puede producir un GW diario, y los espacios y terrenos que ocupan son antieconómicos, es por ello que todos ellos reciben subsidios estatales para su funcionamiento. Amén del uso exorbitante de agua para su limpieza, siempre escasa en los entornos que se ponen, debido que están en lugares desérticos. 

Pero donde se hace más patente la impotencia de las nuevas tecnologías para la generación eléctrica es en China donde se invierten grandes sumas de dinero en el desarrollo de las mismas quien en la última década, como consecuencia del fracaso, ha cambiado su planificación y ha retomado tres acciones estratégicas.

  1. Mantener la generación por usinas alimentadas por carbón que compran directamente a Australia y con ello la injerencia estratégica sobre dicha nación, que recientemente ha sido alterada por la alianza AUKUS.
  2. Potenciar la creación de nuevas centrales atómicas bajo la tecnología PWR de la General Electric, patentes y desarrollos que le fueron transferidos directamente durante la administración Carter, por los acuerdos de Nixon – Deng en 1974.
  3. La creación de las centrales hidroeléctricas de las tres Gargantas en el Río Yangtsé., dicha obra costó aproximadamente 75 mil millones de dólares.   

A la postre, resultó ser no solo un récord en su costo o en su daño ecológico como tanto se denuncia, sino que en el año 2014 alcanzó los 98,8 TWh anuales y redujo las emisiones de CO2 de China en 100 millones de toneladas anuales. Esto ha sentado el precedente que China deseara cumplir con el Acuerdo de Paris y reducir los altos costos de polución sin afectar el rendimiento de su producción. 

El aporte fue tan significativo en su economía, ecología y tecnología, así como en el impacto laboral y social que el PCRCh ha planificado cuatro nuevas represas, la de Wudongde, la de Baihetan, la de Xiluodu y la de Xiangjiaba. 

La capacidad total de las cuatro presas será de 38 500 MW, casi el doble de la capacidad de las Tres Gargantas. Xiluodu y Xiangjiaba están en construcción, mientras que Baihetan se está preparando para la construcción y a Wudongde le falta la aprobación del gobierno. Ocho presas más son en medio de la corriente del Jinshan y ocho más aguas arriba.

En este escenario (2) concluimos que, a nivel mundial, el documento de marras ha relativizado las capacidades tanto, chinas como rusas para enfrentar las crisis energéticas. En el caso europeo, se ha puesto una acción para cambiar por completo la matriz en estos 25 años a GAS – ALTERNATIVAS VERDES (eólico – solar).

EEUU, por su parte, tiene su matriz energética que merece un estudio complementario, es mixto dado la desregulación en el área energética que es casi completamente privada donde compiten principalmente, la hidroeléctrica, la atómica, la del GAS con el impulso del Shale Gas con autoabastecimiento del mismo, y energías alternativas renovables.

Fuente:https://www.sectorelectricidad.com/23413/conozca-la-matriz-energetica-en-estados-unidos-parte4/

Fuentes: US Energy Information Adminstration (EIA´s) U.S. Census Bureau. Disponible en: https://www.eia.gov ; https://www.census.gov y https://www.census.gov/pro grams-surveys/decennial-census/decade/2020/2020-census-results.html

Aun así, pese a los avances energéticos de EEUU se observa la dependencia del petróleo, del GAS y de las fuentes atómicas sobre cualquier otra matriz productiva. 

Fuente: Global Data, Power Intelligence Center. Disponible en: https://www.globaldata.com/industries-we-cover/power/ y Bibliotecas de Reportes: https://store.globaldata.com

En el caso ruso, la matriz, responde básicamente a tres factores: 1) GAS (que es omnipresente en todas sus actividades), 2) la hidroeléctrica y finalmente, 3) la atómica. 

Por otra parte, China, se ha volcado a una matriz principalmente hidroeléctrica, atómica y en forma secundaria renovable. 

Fuente: EIA https://www.eia.gov 

El caso de la República Argentina 

La extensión y la configuración geopolítica de la República Argentina lo definen como un actor relevante para la producción de energía, debido a la gran diversidad de fuentes generadoras, recursos naturales propios y su dimensión respecto del mercado mundial. Asimismo, se encuentra alejado de los conflictos que afectan al abastecimiento de la seguridad energética, aunque hay que destacar que: 

  1. La oferta de energía no siempre acompañó a la demanda, en muchas oportunidades se han tomado medidas de emergencia y coyunturales, situación que requiere planificación de nuevos sistemas de generación.
  2. Principales amenazas que tiene la RA es la falta de inversiones, la ausencia sostenida de un plan que explote los recursos en base a un criterio de diversificación de la matriz de generación de energía 
  3. Existe una creciente integración con los países de la región para generación compartida de energía (Ver mapas a continuación). Esta situación implica ver los niveles de cooperación y dependencia cuyos ejes son: Paraguay Yacyretá, o las vinculaciones entre gasoductos Argentina-Bolivia Argentina-Chile; mismo en la generación de energía con Brasil y Uruguay. Estas relaciones bilaterales tienen ciclos de generación de energía dependiendo de las condiciones climáticas, lo cual gira en torno a cuestionarse acerca de cómo se producirá energía en 2030 frente a los desequilibrios climáticos que azotan la región como por ej: la bajante histórica del Rio Paraná. Asimismo, grandes reservas de Gas (Argentina) y petróleo (Venezuela) con el desafío de transformación de consumo doméstico hacia procesos productivos.
  4. A nivel multilateral no han prosperado las iniciativas energéticas de generación dentro del Mercosur. Además de ser una región con grandes recursos naturales se pueden aprovechar los marcos de integración regional (Mercosur) para el introducir nuevas cadenas de valor en materia de minerales estratégicos y el desarrollo de economías de escala, es decir, grandes regiones de potencial desarrollo de energías renovables.

Gráfico: Distribución geográfica de los principales gasoductos y de las interconexiones hidroeléctricas

  1. El principal problema de la región es la ausencia de un marco institucional (por ej. IIRSA UNASUR procuró el establecimiento de un eje de integración y desarrollo regional) constituyendo proyectos que tiendan a la cooperación energética. Lamentablemente, los avances estuvieron determinados caso por caso, en muchas ocasiones bilaterales y siempre condicionados a cuestiones relacionadas con la infraestructura (de generación, transporte etc.). Además, existen grandes marcos regulatorios a niveles nacionales limitando la participación de los países en tránsito (que no logran estipular inversiones, compensaciones, etc.) afectando la calidad y los niveles de generación.
  2. En Argentina el sistema eléctrico es solo para iluminación, lo cual plantea como principal desafío a futuro la diversificación de la materia energética, considerando que se han realizado esfuerzos para generar parques eólicos (ver anexo 1) y solares (San Juan), que aún no compensan la generación de energías fósiles. Se puede observar la proyección de incorporación de tecnologías limpias y nuevas forma de generación en base a la capacidad instalada (ver cuadro a continuación), que se implementan planes de mantenimiento y readecuación de la capacidad instalada con criterio de eficiencia y baja emisión.

Fuente: MINEM

En esta línea conceptual, la Argentina tiene el desafío de repensar su matriz, y aprovechar las tecnologías propias que desarrolla la CNEA, no solo en lo atómico como es el proyecto CAREM 25, el único reactor modular civil del mundo para generación local de energía. Si bien existen tres modelos en a nivel mundial, estos son experimentales y distintos al propuesto por Argentina, en esta materia específica, solo EEUU, Corea del Sur y China poseen modelos teóricos prácticos. En el caso argentino, el CAREM está en etapa de ejecución y su terminación se estima a finales de 2024.

http://www.unsam.edu.ar/tss/wp-content/uploads/2020/06/GEn-elect-2.png

Fuentes: CNEA: https://www.cnea.gob.ar/es/wp-content/uploads/files/cap2_1.pdf

Donde Argentina presenta un estancamiento sustantivo de su desarrollo eléctrico es en el campo hidroeléctrico.  La última gran obra hidroeléctrica fue Yacyretá en los 2000 (con atrasos y comprobada corrupción en su finalización de obra), quedando estancadas el desarrollo de las represas en la Patagonia Argentina y el mega proyecto Paraná Medio.

Pero desde el lado de la CNEA existen proyectos sumamente relevantes de bajo costo como son los reactores de BIOMASA, que con el uso de un gas plasma y la quema controlada de desperdicios orgánicos se obtiene generación de energía para áreas alejadas o desconectadas del sistema interconectado eléctrico nacional.  

Fuente: CNEA. Disponible en: https://www.cnea.gob.ar/es/wp-content/uploads/files/cap2_1.pdf

¿La energía geotérmica, una posibilidad? 

Argentina posee posibilidades de energía como han desarrollado ISLANDIA, RUSIA y FILIPINAS (que por intermedio de energía geotérmica proporcionó el 26,44% del total de electricidad a su país y 19,903 GW/hora de energía eléctrica de una demanda total de 75,266 Gigawatt/hora) por intermedio de la General Electric, la energía geotérmica.

Argentina posee amplios campos geotérmicos. El más importante la laguna del Chancho – Caviahue en la Provincia de Neuquén. Como así también de más baja intensidad, en las termas naturales que existen en Santiago del Estero, en Termas de Ríos Hondo, en Mendoza en el valle de Cacheuta, y en la provincia de Bs. As. en distintos puntos de la misma.

https://revolucionrenovable.files.wordpress.com/2017/09/argentina-geotermica.jpg?w=930&h=450&crop=1

La energía geotérmica exige un desarrollo científico – tecnológico sustantivo y sus resultados son de mayores niveles de viabilidad que cualquier parque eólico o solar. Muchos de los parques eólicos nacionales se encuentran fuera de servicio por la destrucción de sus turbinas pues no fueron pensadas para vientos superiores a los 80 km/h como existen en estas latitudes. El desarrollo geotérmico representa una posibilidad de asociación con los EEUU o RUSIA para su desarrollo, como así de integración con países tan remotos como Filipinas e Islandia.

Tomando este último país, si extrapolamos su experiencia geotérmica con sus tres centrales instaladas en Nesjavellir, Reykjanes, y Hellisheiði, las mismas producen 120 Mwe, 100 Mwe, y 346 Mwe respectivamente, es decir, que todas juntas están produciendo un total de 546 Mwe. Sumado a ello, el agua caliente que se produce en toda Islandia es de más de 3.000 litros horas disponible para toda la isla, la cual mayoritariamente se destina a la calefacción logrando dos efectos directos, la ecología por la CERO emisión de gas CO2 y la económica por el ahorro energético en la producción de calefacción, dejando la energía elaborada solamente para la producción de electricidad, y con ello dejando la necesidad de GAS NATURAL para la red doméstica. 

¿El Fénix atómico? En este contexto, todos los analistas y aún los partidos verdes (ecologistas) europeos ven la necesidad del resurgir de las tecnologías atómicas, debido a las cero emisiones de CO2. Aquí un nuevo protagonismo los reactores modulares y los avances en el campo de la Fusión Nuclear en base a grandes imanes y al tritio (fuente sin contaminación atómica o nuclear – no existen desechos-). 

Francia se encuentra desarrollando el I.T.E.R. del cual participan más de 40 países, entre ellos Brasil y Rusia, entre otros, y este proyecto representa el avance más importante de la humanidad si llegara a término, pues se produciría energía casi en forma ilimitada a muy bajos costos, a excepción de aquellos de la infraestructura primaria. Esta es una decisión estratégica que el Estado argentino no puede estar ausente, como así también a los desarrollos del W7-X de Alemania o el Tokamak de Rusia o China. 

Una cantidad importante de naciones como Corea del Sur, China, India, las de Europa del Este y el mismo EEUU consideran rehabilitar reactores de fisión atómica como una solución a mediano plazo hasta lograr el equilibrio de emisiones. 

La cuestión demográfica

A fines de 2020 se realizaron censos a nivel mundial, uno de los más importantes de ellos surge los estudios demográficos de la United State Census Bureau que, en conjunto a otras oficinas dedicadas a la materia de estudios poblacionales de Europa y Asia, surgen importantes datos tanto sociales, políticos y econométricos para el escenario planteado en 2030 a 2040, que plantean claro está posibilidades de aplicaciones prospectivas claras para los futuros de medio y largo plazo.

Este censo o informe no es el único sistema que existen para los análisis de poblaciones, por ejemplo, tenemos:

  • La Estadística en el desarrollo social (mediciones sobre el PIB)
  • Nuevas alternativas para medir el bienestar (la tarea de encontrar nuevas formas de medición ha sido asumida por diversas instituciones, entre las que destaca la Comisión Europea -CE-). 
  • Evaluaciones la calidad de vida en la medición de sus logros económicos (método de la Comisión Stiglitz – OCDE)
  • Mediciones de niveles de felicidad (Como alternativas para medir el bienestar de una sociedad, numerosos organismos ya han puesto en marcha indicadores como medidores de calidad de vida, índices de educación, huella ecológica, medio ambiente, indicadores del cumplimiento de los objetivos de la Estrategia de Lisboa, desarrollo sostenible, desarrollo humano, capital natural o, simplemente, sobre la felicidad).
  • Índice de Prosperidad de Legatum (se basa en el análisis estadístico de más de 40 años de datos para más de 100 países en todo el mundo, producido y supervisado por el Legatum Institute, con aportación de la consultora en investigación Oxford Analytica y un panel de asesores respetados en los campos de la economía, la historia, el desarrollo, la sociología y la ciencia política). 
  • Estadística y desigualdad
  • Métodos de Oficinas de Censos Oficiales (INDEC – US CENSUS BUREAU)
  • Métodos de recolección privados (ejemplo www.datosmacros.com).

De estos estudios estadísticos, ya en los años ´50 del siglo XX se planteaban las curvas de campana para el análisis de la población y de su desarrollo. 

Population pyramid 1950 to 2100

Fuente: United nations. Population Division  Disponible en: https://ourworldindata.org/world-population-growth

Resumiendo, las ideas centrales de esos estudios, se preveían que las poblaciones mundiales se estancarían hacia 2020 y que existirían desarrollos acordes entre naciones. La realidad, con los datos, es que abruman dichas posibilidades y hacen inútiles todas las previsiones de Malthus. Las poblaciones han comenzado a descender abruptamente como podemos apreciar en los distintos gráficos.

File:World-Population-Growth-1750-2100.png

Fuente: Our World in Data – Basado en U.N. Population Division & HYDE Our World in Data; Author: Max Roser. Disponible en: https://ourworldindata.org/world-population-growth 

File:World population growth rate 1950–2050.svg

Fuente: Data provided by the U.S. Census Bureau. Disponible: https://www.census.gov/library/visualizations/2011/demo/world-population–1950-2050.html

Fuente: Our World in Data – Basado en U.N. Population Division & HYDE. Our World in Data. Disponible en: https://ourworldindata.org/world-population-growth 

Fuente: UN Departament of Economic and Social Affairs (2019). Disponible en: 

https://reliefweb.int/sites/reliefweb.int/files/resources/WPP2019_Highlights.pdf

Bajo estas previsiones, la población mundial, encontrará un equilibrio en los 9.000 millones de habitantes hacia 2050, al menos esas son las previsiones del U.S. Census Bureau.   

World Population: 1950-2050

Fuente: US Census Bureau. Disponible en: https://www.census.gov/library/visualizations/2011/demo/world-population–1950-2050.html 

La población mundial probablemente alcanzará un máximo de 9.700 millones en 2064 y luego disminuirá a unos 8.800 millones para finales de siglo, a medida que las mujeres tengan un mejor acceso a la educación y la anticoncepción, según nuevos estudios basados tanto en las Naciones Unidas y el US Census Bureau.

Para el año 2100, 183 de 195 países no tendrán las tasas de fertilidad requeridas para mantener la población actual, con 2,1 nacimientos proyectados por mujer, dijeron investigadores del Instituto de Evaluación y Métrica de Salud de la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington. Unos 23 países, entre ellos Japón, Tailandia, Italia y España, verán la reducción de sus poblaciones en más del 50%, dijeron los investigadores.

Sin embargo, la población del África subsahariana podría triplicarse, lo que permitiría que poco menos de la mitad de la población mundial sea africana para finales de siglo. El estudio de modelado, publicado en The Lancet, también pronostica una disminución dramática en las poblaciones en edad laboral en países como India y China, lo que perjudicará el crecimiento económico y podría tener implicaciones negativas para las fuerzas laborales y los sistemas de ayuda social, dijeron los investigadores.

Pero a medida que disminuye la fertilidad, los investigadores señalan que la inmigración podría compensar la disminución de la población, particularmente en países con baja fertilidad, como Estados Unidos, Australia y Canadá. En este contexto, los estados no solo deben ser poderosos en desarrollo militar, economía o niveles de felicidad, sino que su poder se debería medir también en la composición de la edad de su población y su crecimiento, dado que el sistema económico capitalista necesita necesariamente de consumidores y productores, y en este escenario, los mayores productores de bienes y servicios, dejarían de reproducirse y con ello el envejecimiento de su población y la disminución de la misma por la mortalidad natural.

Que claramente envejecida disminuirán las fuerzas laborales, así como su calidad de servicios y aún el mantenimiento de tareas esenciales. Los Estados asiáticos y europeos evidencian efectivamente esta tendencia, aunque tratan de equilibrarlas (estas tendencias negativas) con el aporte migratorio.

Fuente: UN – Population Division (2019). Disponible en: https://ourworldindata.org/world-population-growth 

Ahora bien, en los casos particulares, los más importantes y alarmantes de estudios son Europa, Japón y Corea del Sur.

El caso Corea del Sur

Corea del Sur tiene una población de 51.781.000 personas, por lo que puede considerarse un país con un número significativo de habitantes. Las principales características de la estructura de la población en Corea del Sur:

  • La población masculina es el 50,06%, ligeramente superior a la femenina.
  • Es uno de los países con menos porcentaje de niños respecto a su población total, el 12,54%.
  • Corea del Sur tiene una tasa de natalidad muy baja, de tan solo el 5,9‰, ergo 0,59%

Los surcoreanos, tiene una media de vida de 83,23 años, tienen una esperanza de vida muy alta comparada con la del resto de los ciudadanos del mundo. Corea del Sur presenta una pirámide regresiva (o bulbo), con la base más estrecha que la zona central y un porcentaje de personas mayores significativo. Es una pirámide típica de países desarrollados, con tasas de natalidad y mortalidad bajas y un crecimiento natural muy bajo. Es por tanto una sociedad envejecida y con tendencia a serlo más.

En el año 2021, la distribución de la población de Corea del Sur es:

Población total: 51.305.184 (100%)

Población joven: 6.294.211 (12.27%)

Población en edad de trabajar: 36.511.301 (71.16%)

Población adultos mayores: 8.499.672 (16.57%)

Fuente: UN – Population Division

Fuentes: UN – Population Division y Datosmacro.com

Las estimaciones para 2030 en la siguiente representación gráfica:

Fuente: United Nations.

La población en edad laboral (económicamente activa) será menos del 60% de la población total en el año 2036. La población anciana será más del doble de la población joven en 2028. La población total alcanza su pico en 2024 con 51.347.169.

La población anciana representará el 42.14% de la población de Corea del Sur en 2066, el problema del envejecimiento de la población es grave. Un tema relevante en Corea del Sur es el suicidio.

El suicidio en Corea del Sur es un tema que ubica actualmente al país con la 6° tasa más alta en el mundo según la OMS, así como la más alta tasa de suicidio para un estado miembro de la OCDE.

Una de las razones de sus altos índices en comparación con otros países desarrollados es la gran cantidad de suicidio entre ancianos. 

La prevalencia de suicidio entre los ancianos surcoreanos es debido a la extendida pobreza entre los ciudadanos de la tercera edad en Corea del Sur, con casi la mitad del país y de la población de la tercera edad viviendo por debajo de la línea de pobreza. 

Combinado con la mal financiada red de seguridad social, esto se traduce en suicidios de ancianos por no ser una carga financiera para sus familias, ya que la antigua estructura social donde los hijos cuidaban de sus padres mayores ha desaparecido en gran parte en el siglo XXI.

Como resultado, las personas que viven en las zonas rurales tienden a tener mayores tasas de suicidio.

Sin duda el suicidio es una causa de muerte muy importante en el mundo. Podemos darnos cuenta de la entidad del problema al comparar el número de suicidios con el de asesinatos. En 2019 hubo 309 asesinatos en Corea del Sur, así pues, en Corea del Sur el número de suicidios es muy superior al de asesinatos, hasta el punto de que por cada persona asesinada se suicidaron 44,7 personas. En el gráfico de la parte inferior podemos ver la evolución del número de suicidios en los últimos años. 

Fuente: Datosmacro.com

Coindicen los distintos índices y estudios que los alarmantes casos de suicidios, que son transversales a todos los estratos sociales coreanos tienen cuatro motivos:

  • el sistema económico
  • la falta de un sistema social jubilatorio acorde
  • el envejecimiento poblacional
  • la feroz competencia social y altos estándares sociales.

Estos motivos ya son denunciados ampliamente en el cine y la televisión de dicho país como crítica constante a un sistema capitalista “FEUDALISTA” copiado del modelo japonés, pero exacerbado por los modelos productivos chinos. Es decir, lo peor de los dos mundos de extremo oriente.

A la fecha, Corea del Sur solo tiende a prever como solución a sus problemas poblacionales con la anexión de Corea del Norte, por colapso del sistema estalinista y las constantes hambrunas. La inmigración es escasa o nula, por lo cual el crecimiento demográfico es casi insostenible. Esto se puede traducir en:

  • Falta de una fuerza laboral joven hacia 2030
  • Aumento masivo de enfermedades mentales, suicidios y tasa de delincuencia.
  • Vacío en la defensa militar del territorio por falta de población para mantener las fuerzas armadas de la Nación.
  • Pérdida de la identidad nacional.

El modelo Coreano del Sur se replica en menor o mayor escala en casi todo extremo oriente.

El caso japonés 

Japón, con una población de 125.836.021 personas, es un país muy poblado y tiene una alta densidad de población, con 333 habitantes por Km2.

Japón es la tercera economía del mundo por volumen de PIB. 

Su deuda pública en 2019 fue de 10.802.026 millones de euros, es el segundo país por volumen de deuda, con una deuda del 235,45% del PIB y según este parámetro es el país más endeudado del mundo. Su deuda per cápita es de 85.601€ euros por habitante, sus habitantes son los más endeudados del mundo.

La última tasa de variación anual del IPC publicada en Japón es de agosto de 2021 y fue del 0,4%.

Con tan solo un 2,8% de desempleo, Japón es el país con menos tasa de desempleo del mundo.

El PIB per cápita es un muy buen indicador del nivel de vida y en el caso de Japón, en 2020, fue de 35.157€ euros, por lo que se encuentra en el puesto 25 de los 196 países del ranking de PIB per cápita.

En cuanto al Índice de Desarrollo Humano o IDH, que elabora las Naciones Unidas para medir el progreso de un país y que en definitiva nos muestra el nivel de vida de sus habitantes, indica que los japoneses tienen una buena calidad de vida.

Las principales características de la estructura de la población en Japón:

  • La población femenina es el 51,17% del total, ligeramente superior a la masculina.
  • Es uno de los países con menos porcentaje de niños respecto a su población total, el 12,45%.
  • Tiene un 28,4% de personas mayores de 65 años, y es el país con mayor porcentaje de mayores de 65 años entre su población del mundo.
  • Japón tiene una tasa de natalidad muy baja, de tan solo el 7‰.

Los japoneses tienen un promedio de vida que gira en torno a los 84,36 años, tienen una esperanza de vida muy alta comparada con la del resto de los ciudadanos del mundo.

A pesar de que no es una característica de su pirámide poblacional, sí es importante para su análisis saber que Japón está entre los países que ofrece una mejor calidad de vida las personas mayores según el Índice global de envejecimiento.

Japón presenta una pirámide regresiva (o bulbo), con la base más estrecha que la zona central y un porcentaje de personas mayores significativo. Es una pirámide típica de países desarrollados, con tasas de natalidad y mortalidad bajas y un crecimiento natural muy bajo. Es por tanto una sociedad envejecida y con tendencia a serlo más.

Fuente. Datosmacro.com

Ahora bien, aunque parezca una cuestión recurrente, el fenómeno del suicidio en Japón es algo más que un dato estadístico para convertirse en algo realmente alarmante. Se registraron en 2021, en Japón 20.031 suicidios, 434 menos que en 2017. Esto supone que cada día se suicidan en Japón una media de 55 personas.

En términos porcentuales esto se traduce en que en Japón la tasa de suicidios es de 15,8 por cada 100.000 habitantes, muy por encima de la media de suicidios a nivel mundial, que es de 9,46 por cada 100.000 habitantes. Japón es un país con una alta tasa de suicidios, si lo comparamos con el resto de países del mundo.

De los 20.031 suicidios que se produjeron en 2018, 13.851 fueron suicidios de hombres y 6.180 de mujeres. Así pues, se suicidan 22,5 hombres de cada 100.000 y 9,5 mujeres de cada 100.000 La tasa de suicidios masculina es más del doble que la femenina. Aunque puede parecer que es una diferencia importante, es menor a la diferencia que existe entre ellas en la mayor parte de los países.

Sin duda el suicidio es una causa de muerte muy importante en el mundo. Podemos darnos cuenta de la entidad del problema al comparar el número de suicidios con el de asesinatos. En 2018 hubo 334 asesinatos en Japón, así pues, en Japón el número de suicidios es muy superior al de asesinatos, hasta el punto de que por cada persona asesinada se suicidaron 60 personas.

Fuente. Datosmacro.com y BBC Disponible en: https://www.bbc.com/mundo/noticias-56112465

Los factores en el suicidio incluyen el desempleo (debido a la recesión económica en la década de 1990), la depresión, y las presiones sociales. Hubo un rápido aumento de los suicidios desde la década de 1990. Por ejemplo, en 1998 un incremento del 34,7 % respecto al año anterior. Pero la crisis de la pandemia por el Covid 19 ha hecho crecer los suicidios de mujeres y niños durante el 2020 y 2021.

Desempleo, aislamiento urbano, carga doméstica: el COVID-19 ha elevado la presión para las mujeres y generado alarma en un país que ha luchado por reducir una de las tasas de suicidio más altas del mundo. Aunque la pandemia ha sido difícil para muchos en Japón, las presiones han empeorado para las mujeres. Al igual que en muchos otros países, el número de mujeres que ha perdido su empleo es mayor. En Tokio, la mayor metrópolis del país, alrededor de una de cada cinco mujeres vive sola y los llamados a quedarse en casa y evitar visitar a la familia han exacerbado los sentimientos de aislamiento. Otras mujeres han luchado contra las profundas disparidades en el reparto del trabajo doméstico y la crianza durante la era del trabajo desde casa o han sufrido un aumento de la violencia doméstica y las agresiones sexuales.

La creciente carga psicológica y física de la pandemia ha conllevado un aumento preocupante de los suicidios entre las mujeres. En Japón, 6976 mujeres se quitaron la vida el año pasado, casi un 15 por ciento más que en 2019. Se trata del primer aumento de un año a otro en más de una década.

Entre las mujeres menores de 40 años, los suicidios se elevaron a alrededor de 25 por ciento y entre las adolescentes, la cantidad de chicas de secundaria que se quitó la vida se duplicó el año pasado. Pero aún más preocupante son los eventos de suicidio sobre niños, recordemos que Japón tiene una de las tasas de natalidad más pequeñas del mundo, con menos de 0,4%.

Los suicidios entre escolares japoneses alcanzaron un récord durante el último año escolar, según un informe del Ministerio de Educación en 2021. Japón registró 415 suicidios entre escolares de 6 a 18 años durante el año escolar 2020, el número más alto desde que comenzaron los registros en 1974. La cifra fue 31% más alta que el año escolar anterior, cuando murieron 317 escolares. “El aumento de suicidios es extremadamente alarmante”, dijo a NHK Eguchi Arichika, director de la división de asuntos infantiles y estudiantiles del Ministerio de Educación de Japón.

El Ministerio de Educación de Japón lleva a cabo una encuesta anual de las escuelas en todos los niveles y recopila datos sobre suicidios, acoso escolar y absentismo escolar. El informe del 14 de octubre de 2021 también encontró que más de 190.000 estudiantes de escuelas primarias y secundarias estuvieron fuera de clase durante 30 días o más el año escolar pasado, dijo NHK. Eso es un récord, y aproximadamente un 8% más que el año anterior. “Los resultados muestran que la pandemia ha provocado cambios en el entorno escolar y familiar y ha tenido un impacto en el comportamiento de los niños”.

Contrastando con Corea del Sur, y viendo los distintos índices y estudios que los alarmantes casos de suicidios, que son transversales a todos los estratos sociales japonés tienen siete motivos:

  • el sistema social feudal y competitivo. individualista.
  • el sistema económico.
  • la falta de un sistema social jubilatorio acorde
  • el envejecimiento poblacional
  • la feroz competencia social y altos estándares sociales.}
  • la tradición aceptada por la ceremonia suicida como parte de la cultura japonesa.
  • el racismo xenófobo y misógino.

Estos motivos ya son denunciados ampliamente por la literatura, la prensa, el cine y la televisión de dicho país como crítica constante a un sistema capitalista “FEUDALISTA – XENOFOBO – MACHISTA”, exacerbado por su propio modelo cultural histórico. 

A la fecha, Japón solo tiende a prever como solución a sus problemas poblacionales con una tibia inmigración alimentada por filipinos, vietnamitas, camboyanos, malayos, indonesios y en una ínfima parte de latinoamericanos que inmigran gracias al plan trabajo de temporada por seis meses, extensible a dos años (que presupone casi un sistema de esclavitud laboral por la falta de protección laboral para los trabajadores latinoamericanos como extranjeros en suelo japonés).

Aun así, la inmigración es escasa o nula, por lo cual el crecimiento demográfico es insostenible. Esto se puede traducir en:

  • Falta de una fuerza laboral joven hacia 2030
  • Aumento masivo de enfermedades mentales, suicidios y tasa de delincuencia.
  • Vacío en la defensa militar del territorio por falta de población para mantener las fuerzas armadas de la Nación.
  • Pérdida de la identidad nacional.

El modelo japonés, por cuestiones culturales, es el modelo central que se replica en menor o mayor escala en casi todo extremo oriente.

El continente europeo en particular la EU 

En 2021, la población total de la UE era aproximadamente de 446 millones de personas. Además de ocupar el tercer puesto en población a nivel mundial en la UE la esperanza de vida es una de las más altas del mundo (80,3 años de vida), y disfruta de un alto Índice de Desarrollo Humano. Sin embargo, en 2020 la UE perdió más de 10 % de su población como consecuencia de la salida del Reino Unido de la Unión. Mostrando niveles de crecimiento de población relativamente lento, con edades medias relativamente altas comparadas con otros continentes.

En este contexto, la población de la UE experimenta un proceso desigual entre sus regiones. Por una parte, países como Alemania, donde durante varios años la población envejece progresivamente, debido a la disminución del número de nacimientos y el constante aumento en la esperanza de vida. Por otra, países como Francia que han logrado mantener una tasa de natalidad suficiente.

La elevada esperanza de vida y el bajo índice de mortalidad infantil en la UE muestran que la baja tasa de mortalidad es debida a los avances en los ámbitos de la economía, la salud y la educación.

En cuanto al futuro demográfico de la UE, su número de habitantes deberá incrementarse sustancialmente en el próximo decenio, en parte debido a la inmigración, pero sobre todo gracias al proceso de ampliación, que podría dar cabida a la adhesión de Turquía y varios estados de la ex Yugoslavia, con lo cual la población total de la UE aumentará en más de 100 millones de habitantes.

La Unión Europea ocupa el 3º puesto en el ranking mundial de población, con un total de 501.105.661 personas que se estiman que viven en la UE en 201.112 frente a las 313.232.044 en Estados Unidos. Es decir, la Unión Europea tiene aproximadamente 188 millones de habitantes más que los Estados Unidos (en 2020, la UE perdió 67 millones de habitantes al abandonar el Reino Unido la Unión).

Según un informe de Eurostat, la población de la UE-27 pasará de los 501 millones de habitantes en enero de 2010 a 525 millones en 2035, hasta alcanzar 526 millones de habitantes en 2040. Luego irá descendiendo hasta los 517 millones en el 2060. Así, en 2060, los Estados miembros más poblados serían Francia (74 millones), Alemania (66 millones), Italia (65 millones) y España (52 millones).

También de acuerdo con el informe, la población de la UE-27 continuará envejeciendo y la parte de población mayor de 65 años pasará del 17% en 2010 al 30% en 2060 mientras que los mayores de 80 años pasarán de 5% al 12% durante ese período.

Como características comparativas podemos decir que la población europea es donde más se evidencia su envejecimiento poblacional. Es decir, hay más población anciana que joven. Sucede por estas dos causas:

  • La baja natalidad: En Europa nacen pocos niños por años. Tan solo unos diez niños de cada 1000 personas. Por ejemplo, en África nacen 40 niños por cada 1000 personas. El aumento de edad que puede vivir una persona: en Europa tienen la posibilidad de vivir muchos años por eso hay muchas personas ancianas al nacer un europeo tiene la esperanza de vivir 74 a 82 años.
  • El crecimiento de la población: es lento algunos países tienen crecimiento natural negativo es decir el número de nacimiento es menor que las defunciones, Pero Europa, como así EEUU poseen todavía la regulación poblacional las migraciones. En el siglo XX muchos europeos emigraron a América, en la actualidad ocurre lo contrario, ahora emigran de muchas personas de otros continentes y América del Sur a Europa, como así de los países del Magreb y de Sahel. Esto, está ayudando a que la población de Europa crezca. La inmigración produce otros dos efectos:
  1. Crecimiento de la población activa: la mayoría de los inmigrantes que vienen, pueden trabajar, lo que produce que el número de parados disminuya.
  2. Crecimiento de la natalidad: los inmigrantes son jóvenes y tienen hijos. Así aumenta el número de nacimientos en Europa.

Las tasas de suicidios son altas, pero dispares en toda la Unión Europea. Las incidencias sociales enmarcan claramente estas diferencias de porcentajes dentro de la Unión. Donde los países de Europa del este (ex satélites rusos) y escandinavos encabezan los rankings, y los mediterráneos son aquellos con menores tasas. Es el caso inverso en las tasas criminales. 

Fuente Datosmacro.com

El suicidio no es un tema menor, en cambio, el aborto y la falta de nacimientos si lo son, y ello sumado a las inmigraciones ilegales por los desastres humanitarios de África (Libia, Sahel, etc.), de Siria, Libano, Irak, y China, dan un cambio cultural y social inesperado para toda la Unión, que pierde así su identidad nacional, religiosa y social.

Un claro ejemplo, es el avance islámico, no solo en la religión europea sino además del avance étnico dentro de la Unión respecto a una Europa musulmana. Es claro que frente al 1,6 % de media de natalidad de la Unión, la tasa de fecundidad de los inmigrantes supera el 3,2%. Lo que nos da un alarmante cambio de la composición social y económica de toda la Unión, siendo los casos de Francia, España y Alemania los más transculturizados por familias islámicas. 

Como consecuencia, la identidad y la composición de sus fuerzas armadas, así como de sus fuerzas políticas se ven amenazados por un islamismo extremista, antieuropeo y anti cristiano, que amenaza la seguridad del continente. En esta línea se encuentran Corea y Japón, el envejecimiento de su población es el tema central y que puede hacer perder su liderazgo de crecimiento humano y tecnológico, amenazado por un sistema social solidario que ante la falta de aportantes activo amenaza como en 2008 al colapso económico de toda la Unión. Las perspectivas para el viejo continente, pueden definirse como preocupantes y de “viejo” problemas sin soluciones nuevas.

El caso de EEUU

La población de los Estados Unidos era de 331.449.281 habitantes (censo oficial de 2020 – US CENSUS BUREAU). Esta cifra incluye un estimado de 11.2 millones de inmigrantes indocumentados, pero excluye la población de cinco territorios no incorporados (Puerto Rico, Islas Vírgenes de los Estados Unidos, Guam, Samoa americana e Islas Marianas del Norte). 

Es un país muy urbanizado, con el 81 % de la población residiendo en suburbios y ciudades a fecha de 2014, mientras la tasa de urbanización mundial es del 54 %. California y Texas son los estados más poblados, mientras que el centro poblacional medio de Estados Unidos se ha ido moviendo hacia el suroeste. Nueva York es la ciudad más poblada en Estados Unidos.

La población de Estados Unidos es relativamente homogénea; aproximadamente un 75 % es de raza blanca de origen europeo, en su mayoría británico, alemán, irlandés y en menor medida italianos, sin contar a los hispanos y latinoamericanos blancos, aunque algunos de estos europeos están mezclados entre sí. Se suele utilizar la denominación WASP (White Anglo-Saxon Protestant) para referirse a la “mayoría” de los habitantes de Estados Unidos (aunque en sentido estricto, se excluye de la misma a italianos e irlandeses).

La población de raza negra representa el 13 % de la población. La mayoría provienen de antiguos esclavos africanos traídos en la época de la esclavitud. Además, hay minorías étnicas, que en términos numéricos son muy elevados si se compara con sus países nacionales. Entre ellas se pueden mencionar a la minoría de judíos que con más de 5 millones de integrantes viviendo en Estados Unidos posee casi la misma población que la del mismo Estado de Israel, al igual que a 30 millones de personas de origen mexicano viviendo en los Estados Unidos, lo que equivale a más del 25 % de la población de todo México.

Su población es urbana en un 90 %; se asienta sobre todo en los grandes centros industriales y comerciales del centro y, sobre todo, en la costa. La población de Estados Unidos está envejeciendo; en 2010 había 24 millones de personas mayores de 50 años, las implicaciones son significativas ya que siendo el 32 % de la población total, tienen el 51 % de la riqueza del país. Este grupo de edad gasta más en seguros de salud, medicamentos, remodelación del hogar y turismo internacional.

Se estimaba en 2012 que 90 millones de personas con más de 28 años son solteros que decidieron vivir solos. A partir de 2000 el número de hogares de una sola persona es mayor que las parejas casadas con hijos.

El 85 % de los estadounidenses de más de 25 años ha terminado la educación secundaria y el 68 % se inscribe en universidades. Una pirámide de la población muestra la edad de la población por sexo desde 1950 hasta 2020:

Hombres:151.205.402
Mujeres:156.006.721
0-14 años:20,2 % (hombres 31 639 127 / mujeres 30 305 704)
15-64 años:67 % (hombres 102 665 043 / mujeres 103 129 321)
65 años y más:12,8 % (hombres 16 901 232 / mujeres 22 571 696)

En este caso en particular, se repiten los escenarios europeos, tanto para las tasas demográficas, los suicidios, la criminalidad y el desarrollo. Como excepción a la regla, aunque los suicidios son sustantivos, son superados por la alarmante tasa de abortos en la unión que es un tema controversial pero que afecta gravemente las tasas de crecimiento.

Pero se ve compensado porque los EEUU es la gran aspiradora de inmigrantes del mundo, no solo de trabajadores primarizados o víctimas de catástrofes humanitarias, sino que además es el primer destino de profesionales y científicos altamente calificados del mundo debido claro está por su condición de primera potencia económica del mundo.

Aun, así es sustancial el cambio de la composición social estadounidense, como detalle podemos señalar que solo el cuerpo de marines de la US NAVY posee más soldados de origen latinos (mexicanos y/o descendientes de los mismos) que soldados de origen blanco o de raza afro americana. Y esto es solo una muestra de la compleja transculturización americana. 

El caso argentino

La población de la República Argentina (de acuerdo a las proyecciones del INDEC) al 2019 asciende a 44.938.712 habitantes.

Argentina es un país con baja densidad de población, muy concentrada en el aglomerado Gran Buenos Aires (38,9%), mayoritariamente urbana, un 92% al 2011 y con una gran proporción de personas mayores de 60 años (14,3%). Tiene altas tasas de esperanza de vida (77 años) y alfabetización (98,1%). Argentina es el cuarto país más poblado de América Latina, después de Brasil, México y Colombia. La República Argentina viene registrando una tasa de natalidad estable en los últimos años en todo su territorio.

Hacia 2011 el 92% de la población argentina vivía en ciudades, convirtiéndose en uno de los países más urbanizados del mundo.  En contraste el 40% de los pueblos rurales está en riesgo de extinción. Argentina registra índices socio-laborales diversificados que se acoplan a la posición y distribución territorial. La tasa de mortalidad infantil es del 9,6‰ (baja).

En cuanto a la evolución demográfica argentina se registra una tasa de crecimiento ascendente hasta el año 1914, principalmente debido a la alta tasa de inmigración, un moderado crecimiento entre 1914 y 1947, y un ritmo de crecimiento aún más leve desde 1960 hasta 2001. Esto se explica por el proceso de transición demográfica. En 2010 se visualiza un incremento leve en el ritmo de crecimiento con respecto al censo anterior (10,1 por mil) con una tasa de crecimiento medio anual de 11,4 por mil.

Fuente: INDEC CENSO 2010

La tasa global de fecundidad sobre la base de los datos del Censo 2010 y el Ministerio de Salud se redujo a 2,24 hijos por mujer con respecto a los 2,64 registrados en el Censo 2001.

Hacia 2021, con el avance de las leyes de reproducción sexual y del I.V.E. se redujo nuevamente a 2,04 y 1,99 (variable por falta del censo 2020 INDEC) hijos por mujer, un dato alarmante y debe tener prioridad de estudio. En varias jurisdicciones del país, este índice se encuentra por debajo del índice de reemplazo de 2,1 con respecto a 2001. 

La Ciudad Autónoma de Buenos Aires es la que ostenta el índice más bajo con 1,85 hijos por mujer y la Provincia de Santa Cruz el más alto con 3,14. Estas dos jurisdicciones fueron las únicas en las que hubo un aumento de la tasa global de fecundidad en el periodo 2001-2010.

En el tema puntual de los suicidios, Argentina se encuentra en el cuarto puesto del subcontinente, no siendo un tema central ni de alarma. No así en los índices de criminalidad de homicidios tanto por hechos dolosos como culposos (accidentes de tránsito etc.) que registran aumentos interanuales considerables.

Respecto a la inmigración, si bien no es el gran receptor del siglo XX, en lo que inicia este siglo, Argentina sigue receptando muchos inmigrantes de países vecinos, particularmente paraguayos, bolivianos, chilenos y venezolanos, en menor escala chinos continentales y de países africanos.

Esto ha posibilitado en parte la dinamización de la economía y de los empleos primarios, particularmente dominado por bolivianos, paraguayos y venezolanos. Pero a su vez, esta ola inmigratoria hace particularmente presión, en particular la ola inmigratoria peruano, sobre la criminalidad y el narcoterrorismo.

La Argentina puede en los próximos años, si desarrolla su economía y elimina sus problemas políticos sociales, receptar o recibir a gran cantidad de europeos del este, dado que la crisis energética que se avecina para la Unión Europea pegará muy duro en las industrias y particularmente en el costo de la vivienda y los empleos.

Repitiendo los modelos de Alberdi, la mera promesa de vivienda digna y barata puede ser un atractivo sustancial, como así la de educación en todos los niveles gratuito, un motivo válido para recibir nuevos inmigrantes europeos que pueden ser un gran aporte durante este siglo XXI, y moderar de esta forma la inmigración primarista, que absorbe y mal logra nuestro sistema de salud y educativo.

Por su parte, la Argentina, debería plantearse el modelo americano, español y francés, para la recepción de ciudadanos extranjeros de países limítrofes, estudiando la posibilidad de un servicio militar obligatorio para extranjeros dentro de un sistema de reclutamiento tipo legión extranjera o US. Marine Corps.

Consideraciones finales

Si bien hemos omitido el estudio de INDIA y CHINA, los cuales debería ser analizadas por separado en otro capítulo, dado que la presión demográfica mundial del siglo XXI se ubicará en esas dos naciones necesita un contraste mayor que este simple estudio prospectivo.

El mundo, desde la década de 1960, se ha centrado en la llamada explosión demográfica”, como ha sostenido el Dr. Christopher Murray. 

De repente, ahora estamos viendo este tipo de punto de inflexión en el que está muy claro que estamos pasando rápidamente del problema de tener demasiadas personas a tener muy pocas. Problema que también se evidencia por ejemplo en China donde aún permitido el tercer hijo, ninguna pareja tiene más de un hijo dando tasas de ,096% de natalidad.

En este panorama, el escenario probable y cierto es el Nro. 2 del estudio de tendencias mundiales 2030/2040, donde tendrán especial dinamismo en lo que sucede en África y la región de Indo-Pacífico.

Dicha presión demográfica ha significado un impacto directo en el medio ambiente, donde las naciones ricas en búsqueda de su seguridad energética tienen una demanda creciente de minerales raros, sino que además se ha provocado por ejemplo la crisis de la arena, y aunque suene ridículo con ella la mafia internacional de la Arena manejada por la mafia de la arena hindú. Como casi un cuento de Gabriel García Márquez, lo maravilloso se vuelve real, dado que la escasez de arenas para la construcción debido por ejemplo a la presión de la construcción en los países árabes de los Emiratos Unidos, o de Arabia Saudita o de la propia China (crisis Evergrande Inc.) modifican el medio ambiente con la destrucción de las costas como en África en Costa de Marfil o en las Islas de Cabo Verde donde directamente no poseen arenas de ningún tipo debido a la preda. 

Más grave aún resultan los daños ambientales en veinte islas de Indonesia, que, debido al contrabando y robo de arenas, dicho país hoy demanda a Singapur, principal comprador y regulador del precio de la arena a nivel mundial, por la pérdida de soberanía y territorio en el Pacífico, pudiendo desembocar inclusive en una guerra de escala regional. 

La pérdida de las arenas aptas para construcción, ergo, que son las mismas que hallamos en playas, dado que las de los desiertos son inútiles, son también principal causante de la crisis de los chips y transistores, debido a que en dichas arenas se encuentra el óxido de silicio (Fuente de medicamentos y de materia primara para blanqueamiento de otras materias), el silicio base de casi toda la industria electrónica. 

Esta presión demográfica, hace sin más evidente el exceso de derroche de energía que ha causado en parte no solo el daño ecológico por las emisiones de CO2, sino además de la destrucción de los fondos marinos y playas donde habitan moluscos, bivalvos y otras especies marinas.

La presión demográfica y su mala ubicación, con el agregado del consumismo capitalista ha infectado nuestros océanos no solo de petróleo por los derrames sino además de peligrosas islas de plásticos de tamaños comparables a Bélgica en el Pacífico central y en el Atlántico Sur frente a África.

Moderar no solo la temperatura o las emisiones de CO2 son importantes en las tendencias 2030/2040, sino que a la Argentina se le abren posibilidades tanto industriales, castrenses como tecnológicas.

El plantearse una flota recicladora de plásticos, que no solo puedan salvaguardar el Océano, además sería una Fuente de desarrollo industrial marítimo, como así Fuente de inteligencia naval con la aplicación del poder blando ecológico argentino. Existen en INTI – CONICET y en UTN proyecto en ejecución de reciclados de plásticos en pellets y filamentos para la impresión 3D con difusores, que poseen excelentes resultados, pudiéndose recrear un modelo parecido al americano donde FFAA, Universidades, Privados puedan colaborar y desarrollar en industrias disruptivas no pensadas a nivel mundial como podría ser la recolección de plástico y reciclados de los mismos. Recordemos además que Argentina ha desarrollado el ladrillo ecológico EASY BRICK por intermedio de UBA UTN y un privado, cuya materia prima es el plástico reciclado. Con la utilización masiva de dicho sistema podría solucionarse la construcción de millones de viviendas con un sistema de terminado excepcional y de velocidades insólitas, pudiendo re localizar a millones de argentinos de sus viviendas precarias en casas sostenible, limpias y reciclables.

Los inconvenientes sociales y económicos, con voluntad política pueden ser rápidamente resueltos, pues existen líneas de financiamiento tanto del Banco Mundial y de la ONU en materia de ecología reciclado y vivienda urbana para erradicación de chabolas y narco criminalidad.

SEGUNDA PARTE

Impacto de la competencia RPC-EEUU en el escenario Atlántico Sudoccidental y Antártico y el posible diseño de la estrategia marítima argentina

La competencia entre la RPCH y los EEUU y la creciente demanda de recursos del mar han generado tensiones al interior del entramado institucional internacional y en las interacciones entre Estados revalorizando la importancia del dominio marítimo. Así, los océanos Índico y Pacífico han pasado a ser concebidos como espacios geopolíticos esenciales donde las prácticas unilaterales de los Estados y de actores privados conviven con una mayor demanda de soluciones colectivas a los problemas comunes. Esto ha movilizado el trazado de políticas donde convergen preferencias estatales y privadas tendientes a la defensa de los intereses marítimos para enfrentar los desafíos a nivel internacional y facilitar una gestión más eficiente a nivel doméstico.

En ese contexto, interesa comprender aquellos esquemas de gobernanza internacional del mar, donde hoy dirimen cuotas de poder las grandes potencias, para delinear la posible afectación al escenario domestico Atlántico Sudoccidental y antártico. Como paso posterior, revelar la necesidad de articular una estrategia marítima nacional para enfrentar los desafíos del escenario internacional que sabemos complejo, disruptivo e incierto y que posiblemente pondría en jaque la vigencia de los regímenes internacionales. En nuestro caso particular, el Régimen CONVEMAR. 

Por último, en un documento posterior, proponer el trazado de políticas públicas fundamentando la necesidad estructurar una arquitectura institucional doméstica más centralizada y con mayor articulación en el proceso de toma de decisiones inter burocráticas, hoy signado por una gran dispersión. Un trazado de políticas domésticas que deben necesariamente articularse con los condicionantes tanto del escenario internacional, como el regional.

En ello, entender las peculiaridades de la sociedad argentina caracterizada por actores públicos y privados con preferencias sectoriales dispares y muchas veces contrarias a los intereses nacionales; la permeabilidad de las instituciones gubernamentales a las demandas de dichos actores; tradiciones de pensamiento y obrar afectadas ideológicamente que se resisten a los cambios; el peso de la burocracia estatal donde florecen múltiples niveles de decisión gubernamental y autonomías locales y, la complejidad técnica de los temas marítimos y oceánicos.

La relevancia de los espacios marítimos

  • Es la base de la economía global: el 90% del comercio mundial es marítimo Compuesto por un sistema de industrias que emplean a millones de personas y que generan 24 billones de dólares para la economía mundial cada año, sin considerar la explotación de los hidrocarburos. 
  • Es el espacio por donde llega la energía: el 70% del gas y el petróleo del mundo se encuentra o es transportado a través del mar.
  • Es una fuente de alimento: produce más de 170 millones de toneladas de pescado y mariscos anualmente, uno de los productos alimenticios más comercializados en el mundo; casi el 90% se destina a consumo humano directo.
  • Es la base material de las telecomunicaciones y nuestra vida digital: los cables responsables de transportar la información se encuentran en el lecho de los océanos (ello explica la importancia de las Toninas).
  • Es donde los efectos de la crisis climática se observan con mayor nitidez y se difunden: la desaparición de ecosistemas marinos enteros, la subida del nivel del mar, el deshielo de zonas que solían ser intransitables, la contaminación del agua potable.
  • Es el área por excelencia donde los estados proyectan poder fuera de sus fronteras: hoy es el epicentro de la disputa militar entre Estados Unidos y China.
  • Conecta toda la vida del planeta y la regula, uniendo a personas y a naciones. Su salud es esencial para el bienestar de las sociedades y los ecosistemas. El océano genera más de la mitad del oxígeno que respiramos y más de un tercio de la población mundial vive a lo largo de sus costas. También da forma al clima de la Tierra y absorbe más del 90% del exceso de calor atrapado en la atmósfera por las emisiones humanas de gases de efecto invernadero.

La vastedad de oportunidades comerciales explica la intensificación creciente del uso de los mares y océanos a través de diversas actividades comerciales para aprovechar sus recursos, lo que deteriora su salud y pone en riesgo su sostenibilidad. Esta es una actividad muy poco visible en Argentina desde el punto de vista de su potencial impacto productivo y de innovación de aquellas actividades vinculadas a los recursos oceánicos, las que más recientemente se han comenzado a denominar como economía azul, clave para el futuro de un planeta verde.

Abordar la protección y la gestión del océano bajo criterios de sostenibilidad en la consecución de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) para el año 2030 resignificará comprender los puntos de presión que están afectando a la salud del océano y que habilita pensar un enfoque planetario que mitigue los grandes cambios ecológicos a futuro. Esto supone que, si no se adoptan medidas urgentes tanto a nivel local como global para hacer frente a las principales amenazas existentes, estaremos condenando a las generaciones futuras que deberán lidiar con un océano muy diferente al actual, caracterizado por la degradación, el agotamiento de sus recursos o la contaminación.

En ello entendemos que los avances científicos y tecnológicos y la demografía constituyen los factores medulares en la reconfiguración de la lógica multipolar de las relaciones internacionales y, por ende, hace necesario repensar el dominio de los mares. Analistas internacionales han demostrado en estos primeros decenios del siglo XXI como estos avances han generado una mutación geopolítica en constante evolución sujeto a un bombardeo de información dando lugar a la cibergeopolítica: un espacio en el que, sin importar las delimitaciones territoriales físicas, el uso de las redes funge como vínculo entre generaciones alrededor del mundo. 

En nuestro caso en particular, la propuesta es atrevernos a pensar las dificultades por las que Argentina no puede diversificar su matriz productiva hacia actividades intensivas en conocimiento. La asociación con cambios tecnológicos, de mercado, regulatorios y de organización de la producción a nivel mundial los sectores basados en recursos naturales han también comenzado a abrir oportunidades impensadas décadas atrás para innovar y diversificar la matriz productiva hacia nuevos mercados de alto agregado de valor (Andersen et al 2015, Marin et al 2015, Crespi et al 2018, Red Sur 2014).

Otras dimensiones que hacen a la importancia de los océanos.

En el escenario marítimo se expresan y manifiestan tensiones que pueden ser observadas a nivel global y regional como consecuencia de la interacción de todas sus dimensiones: político-diplomática, económico-financiera, estratégico-militar, medioambiental y científico-tecnológica.

El Estado, sigue siendo la principal fuente de autoridad y la única con poder coercitivo legítimamente reconocido, aun cuando el ejercicio doméstico e internacional de ese poder pueda cuestionarse por el entramado normativo provisto por las instituciones internacionales formales. 

No obstante, debemos reconocer que la primacía de EEUU empieza a ser discutida por otros actores con importantes capacidades y esa disputa se manifiesta en espacios marítimos que son de su esfera de interés geopolítico. Por eso, todas las acciones realizadas por la RPCH son interpretadas como disruptivas y revisionistas por parte de EEUU, dado que altera la distribución relativa de capacidades, modificando la base material de la hegemonía existente. Un hecho que por sí solo, independientemente de cualquier intención, política o acción concreta de la RPCH, es un desafío al statu quo.

La comparación de atributos militares o del poder naval en un sentido clásico (flota, bases y marina mercante) resulta insuficiente para generar el dominio marítimo necesario, puesto la naturaleza multidimensional de las cuestiones oceánicas, por lo cual la superioridad en capacidades militares no necesariamente se corresponde con un mayor grado de seguridad para aquel que la posee, ni es garantía de resultados favorables para el actor más poderoso. 

Un aspecto que permite entender cómo se está reconfigurando el escenario marítimo mundial es el rol que en él juega EEUU a través de su estrategia naval y sus políticas hacia el mar, donde entiende el ejercicio del dominio marítimo como “la capacidad de navegar libremente sobre, por encima y por debajo de los océanos del mundo para proteger los intereses de seguridad de EE.UU.”. Para ello, ha modificado su antiguo concepto operacional para la Armada, la Fuerza Aérea, el Cuerpo de Infantería de Marina incorporando un cuarto componente, el de Ciberdefensa para enfrentar: 

  • Cambios en el equilibrio de poder global en detrimento de la primacía norteamericana;
  • Desplazamiento en el foco en la dimensión geográfica desde la tierra hacia el mar;
  • El reconocimiento de la modificación de algunos escenarios regionales a partir del desarrollo de importantes capacidades aeronavales, comparables, en cuanto a tecnología y alcance, con las de EE.UU. por parte de potencias en ascenso.

El nuevo concepto operacional identifica dos áreas de especial interés y preocupación para EE.UU., el Golfo Pérsico y el Pacífico Occidental, y un adversario potencial en las mismas, la RPCH. Su objetivo es mantener en el tiempo las ventajas de su supremacía militar, independientemente de las restricciones normativas que emanan de la arquitectura jurídica global.

Así como la Guerra Fría tuvo como protagonistas a los grandes ejércitos terrestres en Europa y los misiles nucleares de alcance intercontinental, hoy la carrera armamentística está concentrada en la disputa por el control de los océanos, donde el desafío por excelencia para los EEUU, es el auge de la RPCH

China no tiene todavía capacidad de proyección global pero sí en el Indo-Pacífico, y más concretamente en el Mar del Sur de China, un área donde mantiene antiguos conflictos por reclamos territoriales con Vietnam, Filipinas, Brunéi, Taiwán y Malasia, y que ha llevado a la implementación de una política oceánica donde ha priorizado la construcción de islas artificiales desde hace muchos años en aras de expandir el dominio de esas aguas. 

No obstante, su crecimiento económico, su expansión comercial por casi todo el orbe y su capacidad financiera han sido anticipos de una renovación de su capacidad militar, que ya es considerable. La presión a la que está siendo sometida por los Estados Unidos y sus aliados en los mares de China no sorprende. Una cuestión presente que ya había sido considerada oportunamente por Mearsheimer y conocida como off-shore balancing, pensando sobre todo en Asia-Pacífico, para evitar que China se convierta en hegemón regional y, desde esa posición, aspire a la hegemonía mundial.

La teoría del equilibrio de amenazas de Stephen Walt contribuye a comprender lo que está sucediendo. Por un lado, este acrecentamiento chino se traduce en temor de sus vecinos inmediatos, lo que ha generado la decisión de EEUU a través del acuerdo AUSKUS y en menor medida el potenciamiento de la marina japonesa de dos LPHs para que puedan operar con F-35B y el esperable rol de India, quien tiene históricos enfrentamientos con China, acrecentados por la alianza entre Pekín e Islamabad, aunque se espera mayor cautela que los anteriores, debido a su tradicional política de neutralidad. 

Por su parte, China es la potencia naval que más ha crecido en el último decenio, aunque todavía está al inicio de su capacidad de proyección global. Una medida de ese proyecto es el lugar protagónico que tienen los puertos en las inversiones de infraestructura en todo el mundo. Hoy tiene una capacidad concentrada en su área primaria de interés. En otras palabras, la RPCH juega de local y una parte importante del eje del conflicto es el dominio de las aguas que la rodean, por ello es la importancia que han dado al desarrollo y construcción de portaaviones y submarinos, así como la creación del cuerpo de infantería de marina ocurrido hace 15 años atrás, similar al modelo norteamericano 

Estos reordenamientos de estructuras de poder obedecen a una doble lógica que suponemos conlleva inevitablemente a interrogarnos, que prevalecerá ¿bandwagoning pro chino o balancing contra China? donde además del papel de las grandes potencias de la región, tallan muy fuerte decisiones de países como Vietnam, Filipinas, Singapur o Tailandia por el control del estrecho de Malaca. 

En este rompecabezas, no podemos obviar la problemática e histórica relación de China con Rusia donde hoy suponemos hay convergencia de intereses; los oleoductos siberianos operan a pleno rendimiento para regocijo de ambas partes y para desencanto de los EEUU y sus aliados. Rusia es un actor que se ha reposicionado en el tablero geopolítico europeo merced a la construcción de los Nord Stream, que como hemos expuesto regularán la vida de la vieja UE, no solo la producción, sino el bienestar de sus ciudadanos.

Tampoco podemos obviar los problemas internos de China que hacen también al posicionamiento estratégico de la misma: reivindicaciones en Sinkiang y Tíbet; en Hong-Kong y en Mongolia Interior; el enquistamiento del problema de Taiwán; las profundas diferencias económicas y de mentalidad existentes entre la costa enriquecida y el interior empobrecido, así como la creciente presión soportada por un régimen que se ha abierto al mercado, pero no a la democracia liberal… cuando 500 millones de chinos ya viven con estándares de clase media. 

China tiene aspiraciones hegemónicas, el problema que se le presenta es su dependencia a la importación de materias primas y de fuentes de energía y en ello pesa tanto su desarrollo industrial como el de su capacidad militar que pone en escena el balancing anti-chino, contribuyendo a la estrategia de Washington. Este dilema estratégico, alimentados por factores internos y externos; de recursos y políticos, constituyen un lastre que Pekín debe resolver en lo inmediato si aspira a dar el gran salto hegemónico. 

Ya hemos expresado que la presencia de EEUU en el Pacífico Occidental garantiza la vigencia del status quo vigente llevando el peso del contexto de seguridad y el equilibrio regional. Dentro de ese contexto, EEUU promueve la creación de la alianza anglo AUSKUS, nacida para limitar la influencia militar y la proyección de poder de China en la región indo-pacífica y que incluye el desarrollo de submarinos de propulsión nuclear para Australia. Una circunstancia cuyo foco de atención es la disputa en el Mar meridional de la China, y que The Economist la caracterizó como “la maniobra más dramática y decidida de Estados Unidos hasta ahora para contrarrestar lo que ve como una amenaza creciente de China en la región del Indo-Pacífico”. Se trata de la primera vez que el país norteamericano comparte tecnología nuclear con un aliado que no es el Reino Unido. Un hecho que tiene ocurrencia semanas después de la caótica retirada de Afganistán, la consolidación del pívot militar a Asia.

La forma en la que Estados Unidos decida confrontar o no con China plasmará cuál será su estrategia global. La alianza AUSKUS y la inclusión futura de la India en el frente de contención junto a otros aliados regionales revelará las principales claves de la estrategia norteamericana actual. 

Si bien el centro del conflicto entre Estados Unidos y China es el Indo-Pacífico hay otras cuestiones relacionadas al dominio de los mares no menores que requieren su atención y que se relacionan con el cambio climático y los efectos sobre los mismos. El caso más resonante es el del Ártico, que para las potencias se revela como una oportunidad debido a la apertura de rutas oceánicas como consecuencia del derretimiento de grandes bloques de hielo. 

Desde hace unos años los barcos atraviesan el Ártico para ir de Europa a Asia en cualquier estación y sin la necesidad de emplear rompehielos. La ruta es más rápida –y por ende más barata– que otras opciones como el Canal de Suez y el interés para transitarla va a crecer a medida que el deshielo se profundice

La importancia geoestratégica del espacio donde comparten frontera Canadá, Estados Unidos (Alaska), Rusia, Dinamarca (Groenlandia), Islandia, la región de Laponia, en Suecia, Noruega, Finlandia, y las islas Svalbard, así como el océano Ártico, sumado a disponibilidad de recursos naturales (se estima que aloja 13% de petróleo, el 30% de gas no descubierto y de yacimientos minerales), revaloriza un escenario que, si bien por el momento las líneas de navegación se encuentran delimitadas, es esperable una disputa en escenarios futuros. 

Según académicos especializados, el caso del Ártico es una zona potencial de quiebre, es decir, una zona donde lo que pase ahí va a tener impacto en términos de distribución de poder a nivel global. A medida que florezcan más rutas comerciales en la zona, es posible que canales como el de Suez o Gibraltar pierdan peso.

En esta era del deshielo, propiciado por el cambio climático, la Antártida y los accesos a la misma a través de los pasos bioceánicos que vinculan el Pacífico y el Atlántico Sudoccidental toma relevancia debido a sus oportunidades de posicionamiento geoestratégico, la libertad de los mares, el acceso a los recursos naturales y hasta la futura gestión de turismo. La importancia geopolítica del escenario y que será motivo de conflicto a futuro se cierne sobre la disputa sobre las plataformas continentales y las aguas correspondientes, como lo demuestra el reciente conflicto diplomático entre Chile y Argentina por los límites territoriales.

Suponemos que esta cuestión representa un tema muy importante para Argentina precisamente por la conformación de AUSKUS considerando particularmente que la mayoría de los reclamantes de soberanía sobre el territorio antártico son integrantes del COMMONWEALTH a lo que se suma el reclamo tanto del RU como de Chile por la península Antártida. 

Talla históricamente la existencia de un poder consolidado en el escenario AS que, a grandes rasgos y merced al prolífico accionar británico, se ha mantenido inalterable de Trafalgar a la fecha. Basta trazar una línea imaginaria de las posesiones británicas en el Atlántico Sur para entender lo expuesto – Gibraltar, Ascensión, Santa Elena, Gough, Tristao da Cunha, Malvinas, Georgias y Sándwich del Sur -, toda una concatenación de espacios administrados por los británicos y cuyo trazado nos permite vislumbrar cual es el objetivo final del mismo, el pretendido Territorio Antártico Británico. 

Fuente: Boletín de METROCOSM. Junio de 2016

La Corona Británica, representada por la Reina Isabel II, es la cabeza del imperio; es la titular de la Iglesia Anglicana y soberana del Commonwealth – 53 países que juntos representan aproximadamente un tercio de la población mundial, 14 Territorios de ultramar que reconocen a la reina como su monarca y jefe de Estado y tres islas que tienen jurisdicción independiente.

Esta organización conforma una significativa cantidad de votos (16) en la Asamblea General de las Naciones Unidas. Vale recordar además que el Reino Unido es uno de los cinco integrantes permanentes del Consejo de Seguridad del citado organismo; que es la sexta economía en el mundo; que es una potencia nuclear; que integró desde 1951 la Unión Europea y que es el aliado histórico e incondicional de los EEUU en la OTAN, especialmente a partir del “UKUSA Agreement” de 1946. A ello recientemente sumamos la Alianza AUKUS, citada precedentemente. Así también, que merced a sus territorios de ultramar, sus aguas circundantes representan la quinta Zona Económica Exclusiva (ZEE) del mundo, que ha sido el protagonista y ha tenido continuidad en las sucesivas revoluciones industriales y tecnológicas, que posee el control de espacios de proyección estratégica en el AS, (líneas de comunicación marítima y de los pasos oceánicos), que mantiene una estructura de dominación en donde la Royal Navy es un instrumento privilegiado de la consolidación del poder nacional y que además, es pionero en la creación de ONGs en cuestiones relacionadas a la defensa del medioambiente de los océanos y muy en particular en la Antártida.

¿El impacto en el escenario Atlántico Sudoccidental y la Antártida?

Argentina es indudablemente una nación fluvial, marítima y Antártida tanto por su configuración geográfica, como por historia y por su presencia. No obstante, habitamos un país cuya sociedad se ha criado de espaldas al mar, incluso pese las grandes migraciones allende del mar que nos han forjado como Nación. Esta ausencia de conciencia e identidad marítima nos ha impedido dimensionar la relevancia del mar y por ende ahondar de manera sistémica e interdisciplinaria sobre sus recursos y concebir a partir de los mismos el desarrollo integral de la Nación.

La figura plasma esa realidad que es incontrastable, geográficamente excéntrica a los grandes centros de consumo mundiales, Argentina es una isla en el confín de Sudamérica. Basta mirar desde el cenit a Sudamérica, para comprender esa inmensidad oceánica que la comprende e imaginar la multiplicidad de riquezas y posibilidades de desarrollo que ella contiene

Desde una mirada geopolítica, un país que tiene un litoral marítimo de más de 5000 Km de extensión, que en el desembocan 4400 Km de ríos que, entre otros, componen la Hidrovía Paraguay – Paraná de uso internacional y que representa la principal arteria por donde se exporta el 80 % de la producción nacional y el 95% de las importaciones al país; que constitucionalmente reclama soberanía por 10,5 millones de Km2 de los cuales 6,752 millones de Km2 son aguas; que es puerta de acceso al único continente no explotado de la tierra, la Antártida; que comparte un escenario con naciones que desean hacer uso intensivo del mismo y que es objeto presente de disputa geopolítica entre las grandes potencias y que, además es el único país americano que tiene un conflicto de soberanía con un actor extra continental, cuya sola presencia condiciona su integridad territorial, se entiende que la problemática marítima debería ser una preocupación importante en las agendas políticas nacionales.

Fuente: Fiscalía Criminal y Correccional Federal Nro.1. El problema de la Defensa Nacional. Investigación Preliminar 1/2017

Hechos que otorgan relevancia al escenario Atlántico Sur – Sudoccidental. 

  • Argentina ha presentado en 2009 ante la ONU el límite exterior de la Plataforma Continental argentina que hoy es parte de la legislación interna. Chile acaba de hacerlo recientemente y hay una superposición de áreas al Sur del cabo de Hornos, donde Chile avanza sobre el Atlántico. 
  • Hacia fines del 2020 fue promulgada la Ley 27.557 por la que se incorporó a la 23.968 de Espacios Marítimos Argentinos la demarcación del límite exterior de la PCA más allá de las 200 millas, resultado del trabajo ininterrumpido que fue realizado durante más de dos décadas por la Comisión del Límite Exterior de la Plataforma Continental (COPLA).
  • Desde mediados de julio de 2021, Argentina junto con Brasil y Uruguay han buscado revitalizar la Zona de Paz y Cooperación del Atlántico Sur (ZOPACAS). 
  • La construcción de un nuevo puerto en las Islas Malvinas por parte del Reino Unido. 
  • En enero de este año la Guardia Costera de Estados Unidos, con el respaldo del Comando Sur, llevó a cabo la Operación Cruz del Sur dirigida al combate de la pesca ilegal en el Atlántico Sur, donde Argentina negó la visita del Guardacostas “STONE” a puertos argentinos. 
  • La creación de un AMP de más de un millón de Km2 circundando a Georgias del Sur.
  • La construcción de submarinos con propulsión nuclear por parte de Brasil.
  • La posible construcción de un puerto con capitales chinos en Punta Sayago en Uruguay con capacidad de abastecer a toda su flota pesquera que opera en el AS.
  • La adjudicación de 18 áreas para la exploración de tres cuencas de la plataforma continental argentina en busca de gas y petróleo. La Austral (14.200 km2 con una profundidad de hasta 100 metros), Malvinas Oeste (86.400 km2, de 100 a 600 metros de profundidad) y Argentina Norte (100.200 km2 de 200 a 1300 metros y de 1200 a 4000 metros en aguas ultra profundas) y que representan 225.000 km2 de superficie marítima.
  • El manifiesto interés argentino, independientemente del gobierno de turno, de continuar creando /ampliando AMPs en aguas jurisdiccionales argentinas.
  • La presión internacional a China para que acepte la creación de nuevas áreas marinas protegidas en proximidades al continente antártico.
  • MINDEF ha creado el COMANDO OPERACIONAL CONJUNTO MARÍTIMO (COCM), dentro de la órbita del ESTADO MAYOR CONJUNTO DE LAS FUERZAS ARMADAS y del COMANDO OPERACIONAL.

Las variables

El Cambio Climático

El océano absorbe alrededor del 30% del CO2 producido por los seres humanos, amortiguando el impacto del calentamiento global. Esta circunstancia está cambiando la química del océano, disminuyendo su capacidad de absorber CO2, haciéndolo más ácido y perjudicando a los seres vivos que habitan en sus aguas. La acidez oceánica ha aumentado un 30% desde el inicio de la revolución industrial. El aumento de las temperaturas del mar, las floraciones de algas y los fenómenos meteorológicos extremos también están afectando la salud de los organismos acuáticos y la resiliencia de las operaciones de acuicultura. El cambio climático y los cambios que están sufriendo los ecosistemas están también haciendo que las poblaciones de peces disminuyan y se desplacen.

El cambio climático está generando tanto el derretimiento de los hielos, lo que motiva el progresivo aumento del nivel de los mares, como la ocurrencia de grandes sequias en esta parte del continente sudamericano (calentamiento de las aguas del Pacifico que genera las corrientes del Niño o Niña). Ambos efectos, son cuestiones que están afectando la vida de las poblaciones costeras, la destrucción de áreas de cultivo productivas, la provisión de energía eléctrica y de agua potable, así como las exportaciones y la importación de insumos necesarios para la producción argentina y del resto de los países que utilizan la HPP. 

Este hecho conlleva pensar entre otros aspectos la administración y gestión de la Hidrovía Paraguay – Paraná, un tema de mucha actualidad doméstica y que preocupa seriamente a miles de argentinos que usufructúan la misma y que plantea serios desafíos a las administraciones de gobierno. Es así que nos interpelamos ¿Este desafío actual amerita mantener la actual política de estado del empleo de la Hidrovía establecida desde 1995 o será necesario la construcción de un puerto de aguas profundas en proximidades de la Bahía Samborombón que facilite las trasferencias de cargas? 

Seguramente muchos se preguntarán que vincula esta cuestión con la disputa de poder entre EEUU y la RPCH. Suponemos que obran muchísimos intereses dado que Argentina debe definir la manera en que administraría la misma, lo que conlleva a repensar por caso su logística (empleo multimodal/o el perimido sistema por camión), la infraestructura necesaria para continuar exportando/importando por la misma (trazado de canales, dragado, balizamiento, puertos, Ferrocarriles, carretas, etc.). En breve resumen, el tejido de alianzas comerciales que hacen a un futuro socio estratégico, donde además pesan los intereses del MERCOSUR y de las provincias que son parte de la Hidrovía y de la cuenca del Plata. 

Solo a modo de ejemplo, las sequias generadas por la presencia de la Niña y que provocaron la ausencia de lluvias en la alta cuenca del Paraná, en el Mato Groso brasileño, puso en jaque el diseño actual de gestión de la HPP y de la logística multimodal porque reveló las deficiencias del sistema vigente. Los buques ya no pudieron realizar las cargas previstas en los puertos habituales de carga en proximidades del polo exportador de Rosario y sus adyacencias como consecuencia de la citada bajante, haciendo muy oneroso el flete. Ante ello se presentó la alternativa de completar la carga en los puertos de aguas profundas de Necochea o Bahía Blanca quienes presentaron el inconveniente del traslado de los granos por el estado de rutas y la insuficiencia de las vías de FFCC y la indisponibilidad del empleo de gálibos disponibles para el transporte ferroviario de contenedores en doble estiba. 

Que cuestiones deberían analizarse en detalle ante la posibilidad de ocurrencia de estos fenómenos naturales. Respecto a la Vía navegable troncal, considerar si la profundidad de dragado es compatible con el medio ambiente (pasivos ambientales) /economía / la huella de carbono. Pensar en el empleo de una embarcación de diseño compatible con esta (a GNL), para el transporte a estaciones de transferencia de carga en la rada de La Plata, o en la zona BRAVO (zona de alije en el estuario de Samborombón), inclusive la posibilidad de un puerto multipropósito en la zona de Punta Piedras, cercano al corazón productivo argentino, porque urge reducir los costos del flete originados por la logística. En lo inmediato, repotenciar el uso del puerto de La Plata, trasladando con chatas de empuje los productos desde los puertos del interior, Paraná y Santa Fe prioritariamente. 

La Contaminación marina una variable que destruye la vida de los océanos y por ende del planeta.   

El 40% del océano está afectado por la contaminación, lo que impacta negativamente sobre los hábitats y la biodiversidad. La contaminación por plástico y muy en particular los microplásticos está causando serios problemas en la fauna marina, tanto por su presencia física como por sus químicos liberados. Hay estudios que estiman que 13 millones de toneladas de plástico llegan al océano cada año, lo que provoca, entre otros daños, la muerte de 100.000 especies. Se ha comprobado que alrededor del 80% de la contaminación que llega al océano se atribuye a fuentes terrestres. Tanto las empresas que operan en el océano como en tierra firme tienen un impacto en el océano que debe ser considerado en sus actividades y operaciones.

La degradación del ecosistema y la pérdida de sustentabilidad: Ya en algunos países de Europa, más de la mitad de la costa está urbanizada frente al 2% del interior del territorio. Aproximadamente el 20% de los arrecifes de coral del mundo se han perdido y otro 20% se han degradado y, según el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), incluso con acciones contundentes para estabilizar el calentamiento global para el año 2050, se perderá del 70% al 90% de los arrecifes de coral actuales. Por otro lado, el exceso de nutrientes provenientes de la agricultura que entra en el océano causa eutrofización, creando zonas sin oxígeno que producen la muerte de la mayor parte de la vida marina. El tratamiento inadecuado de las aguas residuales también agrava este problema, un aspecto este que Argentina no ha tratado con la debida premura. El ejemplo notorio quizás lo encontremos en el tratamiento del problema de la cuenca del rio Matanza -Riachuelo (ACUMAR). 

Los residuos industriales son la más grave forma de contaminación del mar, al que llegan desde los ríos o directamente volcados en aguas marino/oceánicas. El irrestricto e incontrolado avance industrial y tecnológico va provocando una “polución marina” que por este medio se disgrega hacia lugares remotos. Se han multiplicado los casos de este tipo de contaminación por fábricas de cloro, pesticidas y otros elementos que vuelcan sus desperdicios industriales y químicos al mar.

Por último, la contaminación generada por el vertimiento de petróleo (principalmente) y otras sustancias (plaguicidas, pesticidas, petroquímicos, detergentes, químicos orgánicos, metales, radioactividad, etc.). El derrame de estas sustancias provoca la contaminación del medio (acuático), destrucción de la naturaleza y quiebre de los ecosistemas.

Se ha podido establecer que algunas especies del sur patagónico de nuestro país, como pingüinos y determinadas especies de moluscos y peces, tienen presencia de mercurio y otros metales que amenazan directamente la vida humana a partir de su ingestión y consumo.

La contaminación marina por radiactividad, donde los desperdicios atómicos que, por accidentes, van finalmente a las aguas y sus fondos marinos y oceánicos. Este tipo de contaminación tiene directa fuente en la utilización de la energía atómica a la industria y diversas centrales, en la propulsión de buques modernos, por el transporte de elementos radioactivos por agua, etc.

Si bien, todavía no se ha producido un desastre radiactivo marino, diversas potencias nucleares realizan pruebas atómicas en aguas. Este tipo de contaminación tiene diversos ejemplos que se han dado en la historia: como ejemplo inmediato de la importancia de esta problemática veremos que se realizó el rescate por EEUU en 1974 de un submarino nuclear ruso (hundido a cinco mil metros de profundidad en cercanías de Hawái) donde se pudo comprobar que los restos se encontraban contaminados con radiación.

Las consecuencias de la contaminación marina van a generar migraciones masivas por la destrucción de sus hábitats y la consecuente carencia de alimentos y agua potable. 

La sobreexplotación pesquera y el descarte 

La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) estima que aproximadamente el 60% de las reservas de peces están plenamente explotadas y en el otro 30% se pesca de manera insostenible. Las poblaciones de peces se explotan aún más por medio de la pesca ilegal no declarada y no regulada (INRND), que es responsable de aproximadamente de 11/26 millones de toneladas de captura de peces anualmente. Operan en esta actividad aproximadamente 300 buques poteros de terceras banderas principalmente chinos, taiwaneses, coreanos y españoles abocados a la explotación del calamar Illex Argentinus. Salvo los chinos, el resto con licencia expedida por el ilegal e ilegitimo gobierno de Malvinas. A ello debemos sumar una cifra variable de alrededor 70 buques supply y reefers que brindan el soporte a la pesca distante y trasladan el producido de la misma a puertos próximos al área, Malvinas o Montevideo. 

Aquí se presentan una serie de circunstancias que motiva un análisis particular y que se relaciona con la internacionalidad del escenario en el área denominada alta mar, la cual se encuentra fuera de los alcances jurisdiccionales del Estado argentino que limita consecuentemente el control del exceso de pesca. La existencia del conflicto con el RU condiciona la creación de una Organización de Ordenamiento Pesquero (OROP) que permita el establecimiento de normas de administración conjunta de los recursos que además presentan la característica de ser transzonales y altamente migratorios (según el Acuerdo de New York). Hoy el conflicto con el RU impide que puedan establecerse acuerdos multilaterales como prevé el citado Acuerdo, no obstante, en aras de la protección ecosistémica del caldero sudoccidental debería pensarse seriamente el trazado de acuerdos bilaterales con al menos los actores de terceras banderas presentes en el escenario, en particular la RPCH quien además de ser el actor más importante en el Atlántico Sudoccidental desde el año 2007 no compras licencias de pesca a Malvinas y ha apoyado reiterativamente a Argentina en el reclamo por la causa Malvinas ante la ONU. ¿Esto lleva a preguntarnos, el alcance de la posible alianza estratégica con la RPCH en la administración de los recursos vivos del Atlántico Sudoccidental?  

Una segunda cuestión es la afectación ecosistémica que proviene del descarte. En aguas del Atlántico Sudoccidental se estima que la flota nacional descarta aproximadamente 850 000 toneladas de pescado anuales, principalmente las especies langostino y merluza. Un problema que se juega tanto dentro como fuera de los limites jurisdiccionales argentinos. En el Área adyacente a la ZEEA la ausencia de controles hace inestimable la afectación por esta práctica predatoria. ¿En aras de la protección de los recursos, serán necesarios los acuerdos bilaterales? ¿Con quién? ¿Estos acuerdos que implicancias tendrían a los intereses nacionales? ¿Contribuirían a la causa Malvinas? 

Otros asuntos que considerar en relación a este tema y que revisten interés geopolítico en relación a la gobernanza de los mares. Desde el año 2008, el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) viene alertando que al menos tres cuartas partes de las zonas de pesca clave del mundo podrían verse seriamente impactadas por los cambios en la circulación, como resultado del debilitamiento y colapso de los sistemas de bombeo natural del océano.

Estas bombas naturales, ubicadas en diferentes sitios a lo largo del mundo incluyendo el Ártico y el Mediterráneo, traen nutrientes a las pesquerías y las mantienen saludables desechando los desperdicios y contaminantes. El aumento de la temperatura de la superficie del mar en las próximas décadas amenaza con blanquear y matar hasta el 80% de los arrecifes coralinos del mundo, uno de los principales lugares de interés turístico, defensa natural contra el mar y los criaderos de peces. Esto a su vez podrá repercutir en la formación del calcio en conchas marinas y corales, pero también en los pequeños organismos planctónicos, la base de la cadena alimenticia.

Los hallazgos aparecen en un informe de respuesta rápida titulado “In Dead Water” – En aguas muertas -, que contiene por primera vez el mapa de los múltiples impactos que la contaminación, las plagas exóticas, la sobreexplotación pesquera y el cambio climático producen en los mares y océanos. “Pero lo peor es la concentración en el 10 al 15% de los océanos de los impactos acumulativos del cambio climático con las presiones existentes de sobrecosecha, pesca de arrastre con redes, plagas de especies invasoras, desarrollo costero y contaminación”, indica el informe.

Este porcentaje de los océanos es mucho mayor de lo que antes se suponía y “coincide con las zonas pesqueras más importantes”, inclusive casi el 7.5% que se estima son las zonas de pesca con más valor económico del mundo, agrega.

El Informe In Dead Water presenta en forma única el impacto de varias presiones que son perjudiciales y que persisten en las pesquerías. También pone de manifiesto los impactos probables del cambio climático, producto de las alternaciones dramáticas en la circulación del océano, lo cual afecta tal vez la tres cuarta partes de las principales zonas pesqueras hasta la preocupación por la acidificación de los océanos. Una cuestión que hoy se replica en varias partes del mundo y ya es relevante en la formación de las corrientes del Niño o Niña. 

“El cambio climático pone en peligro la infraestructura costera, la alimentación, el abastecimiento de agua y la salud de las personas en todo el mundo. Claramente se desprende de este informe y de otros, que el cambio climático se sumará significativamente a las presiones sobre las poblaciones de peces. Esto no solamente es una cuestión económica y de desarrollo, sino también ambiental. Millones de personas, entre ellos muchos de los países en vías de desarrollo, obtienen su sustento de la pesca, mientras que unos 2.600 millones de personas obtienen sus proteínas de los frutos del mar”, señaló.

En nuestro caso particular, por ejemplo, CONVEMAR, no incluye la protección de la biodiversidad marina en las áreas adyacentes a las ZEE, de manera que casi dos tercios de las aguas oceánicas están desprotegidas. Los 193 Estados miembro de Naciones Unidas pretendieron alcanzar en 2020-2021 un Tratado Global de los Océanos que proteja la biodiversidad marina más allá de las fronteras nacionales, aunque al momento no se hayan manifestado resultados esperanzadores.

No hemos de olvidar un hecho reciente que ha tomado estado público y que se relaciona con la conservación del Océano Austral o Antártico, que abarca desde el continente del Sur hasta los 60º Sur, y que se ha convertido en una ‘pieza’ del tablero de la geopolítica global en el que la ciencia, una vez más, ha puesto las pruebas, que indican que hay que proteger las partes más vulnerables con urgencia, pero algunas decisiones, de índole político y económico, van por otros derroteros. Hoy es más difícil que hace 30 años lograr un consenso para que cuatro millones de kilómetros cuadrados de agua –el Mar de Weddell, en la Antártida Oriental y en torno a la Península Antártida– se conviertan en reservas marinas protegidas. Así se constató en el evento celebrado recientemente con motivo del 30 aniversario del Protocolo de Madrid, que ha servido para proteger el medioambiente en ese continente de hielo desde 1991.

Todo lo expuesto debería motivar un detallado análisis del escenario por parte de Argentina por varias cuestiones de orden geopolítico y generar consecuentemente y que ya hemos expuesto anteriormente, una política de estado consensuada y perenne. A continuación, algunos aspectos que consideramos han de analizarse.

La primera cuestión, es que entendemos que el acuerdo AUSKUS pone aún más lejos el compromiso argentino de recuperar Malvinas, Georgias y Sandwich del Sur y sus aguas correspondientes al amparo del derecho internacional . Suponemos que el actor de peso en la negociación, los EEUU, ha afianzado sus compromisos con el RU por lo que es esperable que el propio contexto internacional lo empuje a mantener el status quo vigente, circunstancia que le asegura el control militar del escenario por parte su aliado histórico e incondicional. También suponemos que esta situación condicionará las negociaciones por el reconocimiento soberano futuro de la península Antártida donde como hemos visto tanto el RU como Chile tienen las mismas pretensiones territoriales y como también hemos expuesto, el peso mayoritario del Commonwealth, independientemente del Brexit.

La segunda, se relaciona con la también necesidad de establecer y afianzar las alianzas con los países que forman parte del escenario con quienes debemos trabajar en conjunto por la administración de los recursos y a partir de allí, el dominio marítimo del mismo. En tal sentido, Argentina debe entender que por sí sola no podrá enfrentar los desafíos que se presentan y que deberá acordar concesiones para darle solución al conflicto, sin olvidar su mandato constitucional.

La tercera va de la mano del Brexit y de la también necesaria negociación por el establecimiento de acuerdos bilaterales para la administración y conservación de los recursos vivos y finitos del escenario Atlántico Sudoccidental y antártico. El peso tanto de la RPCH como de Rusia en el contexto internacional y en particular el desarrollo antártico de ambos actores, motiva re pensar el diseño de nuevas estrategias en el tejido de alianzas/acuerdos que equilibren el juego de poder en el escenario, al momento con supremacía anglo. 

La cuarta, el minucioso análisis del marco normativo que vincula toda la problemática presente en el escenario, particularmente los mal llamados Acuerdos de Madrid y el Tratado del Rio de la Plata con Uruguay. Suponemos que Argentina debe terminar de comprender la existencia del conflicto y que el mismo tiene raigambre política y no histórica, independientemente de la validez de su documentación respaldatoria, como así también que existe un vínculo inseparable entre la cuenca del Plata y el Atlántico Sudoccidental.

Por último, consecuente con la normativa internacional y el ordenamiento jurídico nacional, ajustar las medidas burocráticas tendientes a preservar los recursos y promover la defensa de los intereses nacionales. Urge el trazado de un nuevo contrato con las empresas nacionales para el empleo intensivo de la pesca al amparo de la ley General del Ambiente 25675.

Gobernanza marítima

La arquitectura de gobernanza en el mar está creciendo a un ritmo acelerado. Involucra a una gran cantidad de instituciones y actores, como organizaciones y regímenes internacionales, actores públicos y privados, redes de conocimiento y políticas y foros que se desempeñan en múltiples espacios jurisdiccionales. Se ha afirmado que el concepto de gobernanza de los océanos consiste de tres componentes distribuidos a lo largo de cuatro escalas espaciales: global, regional, nacional y subnacional. Los tres componentes son: 

  1. Normas que asignan autoridad y jurisdicción desde lo general a lo específico. CONVEMAR constituye el entramado de normas y reglas de mayor alcance al respecto al que pueden incluirse otros instrumentos legales y regímenes regionales o internacionales parciales bi o multilaterales complementarios. Ej. Acuerdo de New York.
  2. Los patrones de compromisos institucionales a nivel internacional y nacional y por políticas e infraestructuras de administración de base sectorial que tienen importantes funciones vinculantes. Entre otros:  
    • Comisión para la Delimitación de la Plataforma Continental.
    • Tribunal Internacional del Derecho del Mar.
    • Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), en particular el Departamento de Pesca y Acuicultura quien define los mecanismos de gobernanza en cuestiones pesqueras. 
    • Ley de Espacios Marítimos.23.968. Ley Federal de Pesca 24922. Ley General del Ambiente 25675.
  3. La trama normativa que comprenden los procesos de gobernanza del mar fija estándares de comportamiento contra los cuales se pueden contrastar las políticas domésticas, regionales e internacionales sectoriales implementadas y el verificar el comportamiento de los actores que forman parte de dichos procesos. Estos procesos buscan dar trazabilidad a la gestión reduciendo las incertidumbres y evitar las posibles consecuencias del egoísmo, la elección racional o el cálculo estratégico.

Según esta caracterización, refiere a la elaboración e implementación de políticas teniendo en cuenta las restricciones estructurales, institucionales y procedimentales tanto a nivel internacional como doméstico. 

En el campo de la problemática marítima en el escenario Atlántico Sudoccidental, la mayoría de las amenazas derivan de la pesca INDNR, una actividad transfronteriza que requiere la cooperación y coordinación entre diversos Estados. Las brechas en la gobernanza mundial dan lugar a comportamientos deficientes en zonas con capacidad limitada de vigilancia, tal es nuestro caso. Reforzando lo expuesto, resulta imprescindible enfrentar las normas que regulan la pesca al amparo de las normas ambientales que propicien la sostenibilidad en las operaciones comerciales, así como una coordinación entre gobiernos e industrias tanto marítimas como terrestres.

  En el plano nacional / subnacional el problema subsiste en el control de la actividad pesquera dentro de aguas jurisdiccionales argentinas donde se conocen prácticas confusas respecto al exceso de capturas al amparo de un sistema de control poco transparente. Ello trunca la capacidad de otorgar mejores condiciones laborales, generando estancamiento económico, menor empleo, mayor pobreza, e inequitatividad social, lo que transparenta la mala gestión burocrática estatal y que resultaría en tensiones sociales e inestabilidad.

Respecto a este último punto, podemos concluir que lo enumerado no es consecuencia de la ausencia de normas sino a prácticas difusas amparadas por un sistema prebendario que se ampara en un entramado burocrático donde conviven históricamente quien administra el recurso con quien lo explota.

La propuesta, donde luego se redactarán las políticas pertinentes es:

En el plano nacional, la creación de una base federal que centralice la información económico financiera acerca de los puertos públicos y privados habilitados, embarcaciones en operaciones, zonas de producción, procesamiento a transporte y embarque, de modo de contar, en forma permanente y actualizada, con la información necesaria para el monitoreo y control del producido, tanto en lo referido al comercio como al tráfico ilícito, de la que deberían participar la AFIP, el Ministerio de Seguridad, el Ministerio de Transporte, la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables y Marina Mercante, el Ministerio de Agricultura Ganadería y Pesca, la Subsecretaria de Pesca y Acuicultura, el Ministerio de Defensa, el INTA, el SENASA, INIDEP y otros organismos con incumbencia en la materia. Asimismo, proveer los medios necesarios para mantener las actividades de investigación científica pesquera y la vigilancia del escenario acorde a la magnitud del escenario Atlántico Sudoccidental.

En el internacional, la concreción de acuerdos bilaterales que conlleven la administración conjunta de los recursos ictícolas.

b.- El desarrollo económico

El Desarrollo Económico es el eje central de un país para crear la riqueza necesaria que permita generar la prosperidad y el bienestar social de sus habitantes. Desde la época de los descubrimientos y las conquistas, el ámbito marítimo fue el medio de ejecución del desarrollo a través del comercio, implementando un sistema vincular entre las ciudades centrales y sus territorios de ultramar, siendo el transporte fluvial la principal herramienta para el comercio, tanto para el flujo de las mercancías, como de las mercaderías de dichos territorios. Por tal motivo, la actividad portuaria, junto con la necesidad de garantizar una navegación fluvial, marítima y puertos seguros, se transformaron en cuestiones primordiales.  

La República Argentina cuenta con un extenso litoral marítimo y una vía navegable fluvial relevante (conformada por los ríos de la Plata, Paraná, Uruguay y Paraguay) sobre los que se sitúa un importante conjunto de instalaciones portuarias, de uso tanto público como privado, de las que aproximadamente 80 registran actividad comercial en la actualidad.

Lo expuesto hace necesario pensar el actual sistema Hidrovía (tipo de buque y su estructura productiva) que se han transformado sustancialmente desde cuando se concibió traer el buque a la carga. 

Ampliando lo ya expuesto precedentemente, aunque desde otro enfoque, esta decisión política sepultó la idea de construcción de un puerto de aguas profundas en proximidades de la bahía de Samborombón y promovió el desarrollo del área próxima a Rosario (Rosafe) logrando una sustantiva disminución de costos del transporte y que, junto con la biotecnología permitió duplicar la superficie productiva Argentina y triplicar las exportaciones. Pero eso era el contexto que se dio hasta el 2010 donde quedo muy marginado el desarrollo de Santa Fe al Norte, particularmente porque no se fomentaron políticas de control y estratégica para la vía, circunstancia que quitó competitividad en gran parte de los accesos de los puertos públicos.

El desarrollo presente del transporte marítimo (buques Panamax) exige el mejoramiento de las vías navegables (alcanzar profundidades de 40 pies) y el uso de energías no contaminantes (GNL) para no afectar el medio ambiente. Dentro de ese contexto, Argentina debe estructurar un nuevo diseño logístico multimodal que suplante al camión y prepondere el transporte marítimo con barcazas y el tren y el desarrollo de la infraestructura necesaria para operar todo tiempo durante todo el año (mejora de muelles y los hinterlands de acceso a los mismos).

Hace poco más de medio siglo la marina mercante argentina era la segunda del hemisferio, solo superada por Estados Unidos. Argentina pasó del 36% del total del mercado de fletes del comercio exterior en 1981, a 0,9% en la actualidad. La flota fluvial, por citar otro ejemplo, solo transporta el 2% de la carga fluvial del Mercosur. La actividad naviera argentina ha quedado reducida al cabotaje marítimo ya que el transporte fluvial por la Hidrovía Paraná Paraguay está dominado por Paraguay, Brasil y Bolivia ante la falta de unidades argentinas. La industria naval argentina en su momento tenía 5 mil trabajadores, 5 mil técnicos, con capacidad para hacer buques petroleros y buques destinados a la defensa. Hoy se construyen 2.000 barcazas y 200 empujes en Asunción, donde hay cinco grandes astilleros. Por el contrario, Argentina compra buques de guerra, pesqueros con exenciones tributarias y de investigación científica en el extranjero. Argentina necesita acercar posiciones y consensuar acuerdos públicos, que se consoliden como políticas públicas. Es hora de un cambio de visión geopolítica y de mayor conciencia marítima para fortalecer la soberanía estratégica del mercado de bienes y servicios.

Este desarrollo de la vía navegable involucra a la industria naval, al tráfico de barcazas, y las banderas que navegan la HPP, hoy mayoritariamente Paraguay y Bolivia. Para ser competitivos y por ende desarrollar una bandera nacional es necesario reducir los costos laborales y los impuestos y pensar en regímenes de promoción tributaria.

En un concepto más amplio del desarrollo económico se estima que la economía azul en Argentina podría generar en los próximos 20 años, en un escenario conservador, un valor de 216 mil millones de dólares, con un potencial de generación de divisas de 157 mil millones de dólares y la creación de 169.209 nuevos puestos de trabajo (Baruj y Drucaroff, 2018). Una estimación mayormente concentrada en los sectores más tradicionales de la economía azul que deja de lado algunas de las actividades emergentes y de mayor contenido de conocimiento e innovación como la acuicultura, la energía azul (oceánica y eólica offshore), la biotecnología azul o los nuevos materiales de origen marino con un vasto campo de aplicación en farmacéutica, agricultura, ganadería etc. Una mirada al escenario internacional muestra cómo los esfuerzos están concentrándose cada vez más en estos sectores emergentes dada su horizontalidad, contenido de conocimiento y potencial para agregado de valor e innovación (European Comission 2019; Johnson y Dalton 2018; Banco Mundial 2016).

Las cuestiones geopolíticas en el escenario AS y antártico y el diseño de una estrategia marítima 

Argentina enfrenta un reto significativo en el marco de una enorme debilidad interna y elocuente vulnerabilidad externa. En función de las necesidades futuras que se vislumbran en un contexto nacional e internacional signado por los avances de la tecnología y la inteligencia artificial, el cambio climático, las debilidades de la gobernanza marítima y el conflicto respecto a la disputa de soberanía de Malvinas, Georgia, Sándwich del Sur, las aguas correspondientes y la Antártida del que no está ausente la disputa de poder entre la RPCH y los EEUU. estimamos conveniente abordar multidisciplinariamente el estudio de las siguientes cuestiones que suponemos deberían considerarse para el diseño de una estrategia marítima consensuada al más alto nivel de la política doméstica y que entendemos coadyuvaría a la defensa de los intereses nacionales en el escenario descripto en el próximo decenio.

  1. La Antártida y el conflicto por el archipiélago de Malvinas y sus aguas correspondientes. Los pasos bioceánicos y su importancia geopolítica. 
  2. Los ríos y su vinculación con el mar y con el estuario del Plata. La HPP. El dragado, el boyado, las represas, las zonas de alije, el Canal Magdalena, etc.
  3. La Cuenca del Plata y la ría de Bahía Blanca y su vinculación con el escenario AS. El manejo federal de las zonas costeras.
  4. El desarrollo de la Patagonia (espacio semivacío). Accesos libres a rutas y puertos patagónicos y conexión con Tierra del Fuego sin interferencias. El polo logístico antártico.
  5. El turismo antártico y los deportes náuticos. 
  6. Transporte marítimo. El comercio exterior. La Marina Mercante Nacional, la marítima y la fluvial.  
  7.  Desarrollo de la industria naval y la importancia de los astilleros. 
  8. La gestión portuaria y la logística multimodal asociada. El sistema de transporte multimodal recuperando la planificación estratégica de los ferrocarriles, las hidrovías y los pasos fronterizos.
  9. El/los puertos de aguas profundas o zonas de transferencias intermedias Los puertos secos.
  10. La problemática pesquera. Los recursos vivos del mar y la acuicultura. La pesca INDNR. El descarte pesquero. La legislación vigente. El control del producido pesquero en los puertos.
  11. La generación de energía hidroeléctrica, mareomotriz y undimotriz.
  12. La Investigación científica marina y el cuidado de la biodiversidad marina. La protección y conservación del ecosistema marino. Los fondos marinos y la explotación de los recursos geológicos y energéticos.
  13. El tendido de los cables submarinos y el Hinterland asociado. 
  14. Las Áreas marinas Protegidas como imperativo geopolítico.
  15. La vigilancia y control de los espacios marítimos y fluviales de interés nacional.
  16. La Defensa Nacional concebida para un marco de INCERTIDUMBRE ESTRATÉGICA y con una sólida red de alianzas consensuadas al más alto nivel de la política.

Un aspecto muy importante y que cruza toda la problemática expuesta, es promover una propuesta educativa de calidad. Todo el esfuerzo social y económico en el tema será poco, porque de sus potencialidades surge la identidad ARGENTINA y la conciencia nacional. La educación en un país como el nuestro, indudablemente termina siendo parte de un conflicto estratégico, máxime donde la pandemia ha hecho estragos en la educación. 

Quizás si generamos la conciencia nacional podamos visibilizar esta realidad expuesta y los argentinos podamos vislumbrar lo desconocido y que esta acción se traduzca en el nervio movilizador que motive el interés y la defensa de lo que nos pertenece.  

En ese contexto, a nuestro entender el diseño de esta estrategia marítima y el diseño de políticas de estado posteriores, requiere de tres condiciones básicas. 

a.- Reconocer la envergadura del desafío y alcanzar el indispensable consenso político nacional en la materia. Argentina debe salir de la trampa generada por intereses propios y foráneos de la insolvencia estratégica sustentada a través de la ideología en un mundo global cada vez más inestable y necesitado de recursos.

 b.- El trazado de alianzas, al menos en el plano regional. Para ello es necesario establecer un eje geopolítico de miras a los desafíos propios del contexto, y que además el mismo debe ser consensuado y perenne. Plantearse seriamente el rol de Argentina frente a los principales actores presentes en el Atlántico Sudoccidental y aquellos que hoy dirimen sus cuestiones de poder en otros lares y que irremediablemente afectaran los intereses argentinos. 

Todo ello en virtud que entendemos, frente a la realidad política nacional, que caracterizar geopolíticamente al país nos permite evitar discusiones retóricas sobre el destino del mismo y entender mejor su política exterior, por encima de ideologías o “modas” políticas coyunturales que nos han llevado a este presente.

c.- Poseer un IIMM acorde a las necesidades propias de los desafíos del siglo en marcha que ya fueron enunciadas en el documento TG.

La Batalla de Malvinas de 1982 significó para la Argentina, un retroceso geopolítico con la pérdida del control de un extenso territorio insular y marítimo. Transcurridos 39 años desde el fin de la contienda la Argentina no ha encontrado los caminos para lograr la restauración de los territorios en disputa. Suponemos que esta afectación de uno de los intereses vitales de la Nación es resultado del estado de indefensión argentino, una cuestión invisible para la mayoría de los argentinos sobre la que pesa una enorme carga ideológica. Esta situación es consecuencia del progresivo alejamiento del instrumento militar argentino en el escenario Atlántico Sudoccidental (AS) una cuestión que además de retardar el desarrollo integral de la Nación, ha privado a la misma de una herramienta clave de la política exterior para negociar por los pretendidos intereses nacionales. 

Considerando el estado interno de la Argentina y su posicionamiento internacional, creemos que es en extremo importante y urgente consensuar una decisión política que, ajena a los apasionamientos ideológicos siente las bases para establecer políticas de Estado que replanteen la necesidad de dotar a la Nación de un IM acorde a los desafíos del siglo en marcha. Suponemos que dicha acción política debería considerar al menos tres cuestiones importantes y que contribuyen a lo expuesto hasta aquí. 

  1. Cumplir lo establecido en el art 8 de la ley de Defensa Nacional que reza que, entre otras cuestiones, el Sistema de Defensa Nacional tendrá por finalidad
    1. Determinar las hipótesis de conflicto y las que deberán ser retenidas como hipótesis de guerra;
    2.  Elaborar las hipótesis de guerra, estableciendo para cada una de ellas los medios a emplear;
  2. Establecer una mayor coordinación respecto al control de todas las actividades que se vinculan con el mar. Podría diseñarse un Ministerio del Mar donde interactúen aquellas áreas vinculadas con la generación de riqueza y desarrollo proveniente del mar y para el mar (Pesca, Marina Mercante, Industria Naval, Producción, Comercio Exterior, etc.), así como la protección del mismo, la Investigación científica marina y pesquera, la tecnología, la Defensa, la Seguridad, la preservación ecosistémica y de la biodiversidad del ambiente marino.
  3. La modificación del presupuesto para la defensa. Los cuadros a continuación permiten observar el esfuerzo que ha realizado el Estado argentino en procurar la protección de sus intereses nacionales. 

Es evidente la reducción presupuestaria para el instrumento militar a partir de la década del 90 y que coincide temporalmente con la promulgación de la ley de Seguridad Interior donde quedaron plasmadas las diferencias entre la Defensa y la Seguridad Interior. 

Con este diseño presupuestario, donde aproximadamente el 80% del mismo es empleado para el cubrimiento de los salarios de sus integrantes, con meridiana certeza algunos especialistas han coincidido en afirmar que la República Argentina se encontraba en estado de indefensión, particularmente en el mar hace ya tres lustros atrás dada la imposibilidad de hacer frente a las amenazas emergentes del siglo en marcha. Quizás sirva como referencia para justificar lo expuesto recordar el incendio en navegación del Rompehielos ARA “Almirante Irizar” (2007), el hundimiento en puerto del Destructor ARA “Santísima Trinidad” (2013) o la pérdida en navegación del Submarino ARA “San Juan” (2018).  

En el grafico a continuación se especifica cómo se invierte dicho presupuesto dentro de MINDEF .

Fuente: Ganeau Eduardo. Ensayo Necesidad de una perspectiva Estratégica para la Defensa. CARI. INSTITUTO DE SEGURIDAD INTERNACIONAL Y ASUNTOS ESTRATÉGICOS.

La Defensa Nacional tiene importantes recursos de organización, medios materiales y humanos con capacidades de comando y control, movilidad, vigilancia e inteligencia, logística y operaciones de combate y de asistencia humanitaria que pueden contribuir a obtener y proteger la integridad territorial establecida en la Constitución Nacional y sus leyes contribuyentes que está parcialmente usurpada, amenazada y en disputa, y constituye el gran desafío que el pueblo argentino y que sus gobiernos no quieren afrontar.

Anexo 1

RONDA / Res.TecnologíaID ProyectoProvinciaLocalidadProyectoSocio EstratégicoPO OFERTA (u$s/MWh)Potencia Adjudicada
(MW)
Fecha Firma ContratoFecha Probable de IngresoFecha Alta Contrato
1EOLEOL-14BUENOS AIRESBahía BlancaP.E. García del RioBRISA DE LA COSTA S.A.49,8110,023/01/201714/11/201914/11/2019
1EOLEOL-17BUENOS AIRESBuratovichP.E. Vientos del SecanoENVISION ENERGY 249,0850,023/01/201705/04/2020 
1EOLEOL-06BUENOS AIRESVillalongaP.E. VillalongaGENNEIA I54,9650,012/01/201719/12/201819/12/2018
1EOLEOL-16NEUQUENConfluenciaP.E. Los MeandrosENVISION ENERGY 253,8875,023/01/201731/12/2040 
1EOLEOL-15RIO NEGROPilcaniyeuP.E. Cerro AltoENVISION ENERGY 256,9850,023/01/201731/12/2040 
1EOLEOL-44BUENOS AIRESBahía BlancaP.E. CortiC. T. LOMA DE LA LATA58,00100,023/01/201708/06/201808/06/2018
1EOLEOL-22CHUBUTGarayaldeP.E. Garayalde3 GAL S.A.59,0024,212/01/201728/11/201828/11/2018
1EOLEOL-35BUENOS AIRESVillarinoP.E. La CastellanaCP RENOVABLES61,5099,012/01/201718/08/201818/08/2018
1EOLEOL-33CHUBUTPampa del CastilloP.E. KostenENAT S.A59,4124,023/01/201710/05/2020 
1EOLEOL-05SANTA CRUZLas HerasP.E. Vientos Los HérculesEREN62,8897,223/01/201715/07/2020 
1EOLEOL-08CHUBUTPuerto MadrynP.E. Chubut NorteGENNEIA I66,0028,412/01/201712/12/201812/12/2018
1EOLEOL-46LA RIOJAAraucoP.E. Arauco II (Etapa 1 y 2)ARAUCO S.A.P.E.M.67,1999,812/01/201714/03/202014/03/2020
1,5EOLEOL-45BUENOS AIRESTres ArroyosP.E. PampaSINOHYDRO CORTPORATION LIMITED 46,00100,021/11/201731/12/2040 
1,5EOLEOL-29BUENOS AIRESMiramarP.E. MiramarISOLUX INGENIERIA S.A.56,3897,710/10/201715/06/2020 
1,5EOLEOL-48BUENOS AIRESNecocheaP.E. Vientos de Necochea 1CENTRALES DE LA COSTA ATLÁNTICA S.A 55,5038,021/11/201708/02/202008/02/2020
1,5EOLEOL-19LA PAMPAGral. AchaP.E. La BanderitaFACUNDO FRAVEGA49,9836,812/09/201706/04/201906/04/2019
1,5EOLEOL-09RIO NEGROChoele ChoelP.E. Pomona IGENNEIA S.A.54,88100,026/05/201712/07/201912/07/2019
1,5EOLEOL-20SANTA CRUZPuerto DeseadoP.E. Del BicentenarioPETROQUIMICA COMODORO RIVADAVIA S.A.49,50100,026/05/201713/03/201913/03/2019
1,5EOLEOL-27CHUBUTPuerto MadrynP.E. Loma Blanca 6ISOLUX INGENIERIA S.A.53,53100,010/10/201715/08/2020 
1,5EOLEOL-37CORDOBAAchirasP.E. AchirasCP RENOVABLES S.A.59,3848,026/05/201721/09/201821/09/2018
1,5EOLEOL-47LA RIOJAAraucoP.E. Arauco II (Etapa 3 y 4)PARQUE EÓLICO ARAUCO  S.A.P.E.M.56,6795,030/06/201731/12/2040 
1,5EOLEOL-32MENDOZASan RafaelP.E. El SosneadoEMPRESA MENDOCINA DE ENERGÍA S.A.P.E.M.55,0050,030/06/201731/12/2040 
202EOLEOL-202-01CHUBUTTrelewP.E. Loma Blanca IISOLUX INGENIERIA S.A.76,2350,031/05/201715/09/2020 
202EOLEOL-202-02CHUBUTTrelewP.E. Loma Blanca IIISOLUX INGENIERIA S.A.76,2350,031/05/201708/02/202008/02/2020
202EOLEOL-202-03CHUBUTTrelewP.E. Loma Blanca IIIISOLUX INGENIERIA S.A.76,2350,031/05/201715/09/2020 
202EOLEOL-202-04SANTA CRUZPuerto DeseadoP.E. Koluel Kayke IIEólica Koluel Kayke S.A.72,3325,031/05/201731/12/2040 
202EOLEOL-202-05CHUBUTMalaspinaP.E. Malaspina ICENTRAL EÓLICA PAMPA DE MALASPINA S.A72,3350,031/05/201715/07/2020 
202EOLEOL-202-06CHUBUTPuerto MadrynP.E. Puerto Madryn IGENNEIA S.A.76,2370,031/05/201702/11/201802/11/2018
202EOLEOL-202-07CHUBUTPuerto MadrynP.E. Puerto Madryn IIGENNEIA S.A.76,23150,031/05/201726/09/201926/09/2019
2-F1EOLEOL-003BUENOS AIRESGarcía Del RíoP.E. ENERGETICA ICMS DE ARGENTINA S.A.37,3079,818/05/201806/02/202006/02/2020
2-F1EOLEOL-004LA PAMPAGeneral AchaP.E. GENERAL ACHAMIGUEL ONETO 45,6760,023/11/201815/05/2021 
2-F2EOLEOL-010CHUBUTDepartamento De EscalanteP.E. PAMPA CHUBUTENEL GREEN POWER ARGENTINA SPA 40,27100,026/06/201831/12/2040 
2-F1EOLEOL-016CHUBUTPuerto MadrynP.E. CHUBUT NORTE IVGENNEIA S.A.38,9082,826/06/201805/06/2020 
2-F1EOLEOL-020CHUBUTPuerto MadrynP.E. CHUBUT NORTE IIIGENNEIA S.A.38,9057,626/06/201815/07/2020 
2-F2EOLEOL-022BUENOS AIRESTornquistP.E. SAN JORGEPETROQUIMICA COMODORO RIVADAVIA S.A.40,27100,012/07/201819/12/2019 
2-F2EOLEOL-025BUENOS AIRESTornquistP.E. EL MATACOPETROQUIMICA COMODORO RIVADAVIA S.A.40,27100,012/07/201819/12/2019 
2-F1EOLEOL-029LA RIOJAAimogastaP.E. ARAUCO II (ETAPA 5 Y 6)WINDAR RENOVABLES S.L.46,67100,005/10/201831/12/2040 
2-F1EOLEOL-035SANTA CRUZCañadon SecoP.E. CAÑADA LEONYPF ENERGÍA ELÉCTRICA S.A.41,5099,023/11/201815/07/2020 
2-F1EOLEOL-041BUENOS AIRESBahía BlancaP.E. LA GENOVEVACENTRAL PUERTO S.A.40,9086,626/07/201815/06/2020 
2-F2EOLEOL-049CHUBUTComodoro RivadaviaP.E. DIADEMA IICAPEX S.A.40,2727,604/06/201818/09/201918/09/2019
2-F1EOLEOL-051BUENOS AIRESMiramarP.E. VIENTOS FRAY GUENSENVION GMBH39,55100,004/06/201831/12/2040 

Fuente: CAMMESA https://portalweb.cammesa.com/Documentos%20compartidos/Noticias/Mater/Informe%20Renovables%20DIC%202019.pdf 

Nota:  El cuadro es ejemplifica las relaciones entre inversión y generación energética limpia (potencia MW) y su proyección a lo largo de la vida útil del aerogenerador. Muestra la falta de escala para absorber cantidades crecientes de demanda. 

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Sitios Web Consultados

World Nuclear Report: https://www.worldnuclearreport.org/IMG/pdf /wnisr 2021-lr.pdf