TRECE ÁREAS DE INCERTIDUMBRE EN LAS QUE DEBEMOS ENFOCARNOS
1. Gestión del cambio climático
La gestión del cambio climático se encarece y aumenta su complejidad con el paso del tiempo, requiriendo soluciones en la matriz de generación energética, la inversión en procesos de reversión para la absorción del dióxido de carbono y la gestión de los entornos fluvial, marítimo y antártico entre otros aspectos. Las medidas que se adopten impactan en los modelos productivos, las prácticas, los patrones de cooperación internacional y los marcos de actuación en seguridad y defensa.
2. Aumento de la demanda y competencia por los recursos
El crecimiento poblacional y del nivel de vida demandarán más recursos y aumentarán la competencia por su obtención a nivel global y nacional. Un crecimiento desigual podrá limitar el acceso a comunidades con mayores dificultades para adaptarse al cambio y generar un desafío para la gobernanza nacional y la contribución al sistema internacional. Comunidades excluidas pueden generar protestas y alteraciones a la seguridad nacional que limiten la posibilidad de alcanzar el bienestar en armonía que se desea. El impacto de la competencia por los recursos naturales podrá manifestarse con mayor intensidad sobre aquellos requeridos para el desarrollo de nuevas tecnologías, vinculados a la energía, el agua y en el entorno marítimo, sea en los jurisdiccionales o en los espacios comunes globales marítimos y en la Antártida, planteando un desafío para la gobernanza nacional que pone en evidencia la necesidad de combinar la solución de problemas de corto plazo con una mirada de largo plazo.
3. Gestión del cambio demográfico
El aumento de las poblaciones jóvenes podrá incrementar las migraciones internas desde zonas rurales a las ciudades en busca de trabajo, alimentando el crecimiento urbano no planificado, en particular en barrios periféricos para sectores de menos recursos y conducir a mayores demandas de liderazgo efectivo para abordar la fragmentación social y las protestas masivas. Al mismo tiempo podrá requerir esfuerzos de los sistemas de seguridad social y ciudadana para evitar situaciones de inseguridad y el crecimiento del crimen organizado.
4. Empleo y fuerza laboral
La incorporación de tecnologías continuará generando nuevos desafíos para incorporarse al mercado laboral, demandando nuevos modelos educativos, de gestión, liderazgo y prácticas laborales que incluyan la evaluación de la sostenibilidad de los sistemas de salud y jubilaciones asociados, previendo una mayor competencia de la actividad privada sobre el ámbito estatal.
5. Aumento de la desigualdad y fragmentación social
El diferente ritmo de disminución de la desigualdad a nivel global y nacional puede conducir a la pérdida de la cohesión social y fragmentación promoviendo líneas de inestabilidad y demandando del Estado mayor promoción de la seguridad humana, plantea un desafío para la gobernanza que podría implicar la necesidad de revisar la organización del Estado y la adaptación para alcanzar el desarrollo y el bienestar nacional.
6. Amenaza creciente del crimen organizado
Existe un fuerte vínculo entre violencia y extremismos, corrupción, crimen organizado y fragilidad del Estado, se combinan las redes de crimen organizado globales con las nacionales alimentando y conectando las áreas de conflicto, es un desafío para la gobernanza promover el desarrollo sostenible con armonía social y protección de los intereses nacionales.
7. Deterioro de la autoridad del Estado
Frente a la velocidad de cambio, incertidumbre, demandas crecientes de la población y la disputa con privados por la prestación de servicios públicos, aumenta la demanda de adaptación del Estado para alinear los objetivos de las organizaciones, la capacidad de trabajar cooperativamente con gran cantidad de actores diversificados y responder a las expectativas de las comunidades productivas.
8. Aumento del valor de la información
El crecimiento e importancia de la información, con una pequeña porción de este dominio bajo control, puede aumentar la desinformación y radicalización de las opiniones a nivel global y local, promoviendo la demanda de nuevas regulaciones internacionales y nacionales para responder a los desafíos que plantea la utilización y oportunidades del manejo de los datos, incluyendo la defensa contra ciberataques y un abordaje gubernamental integrado y cooperativo de todo el Estado.
9. Gestión del cambio tecnológico
El impacto de los cambios tecnológicos en la cultura y las desafiantes predicciones sobre la interacción, diversidad y aceleración, aumentan la demanda de abordaje interdisciplinario para garantizar la interoperabilidad, el liderazgo efectivo del cambio, la inversión en investigación y desarrollo y la promoción de adaptación hacia patrones de funcionamiento público-privados. Esto incluye mejorar la comprensión tanto de su impacto sobre la mejora humana y la ampliación de sus límites, como la generación de nuevos valores en la sociedad. En este sentido resulta significativo el papel de la inteligencia artificial y su ampliación a nuevos ámbitos, cuya velocidad de adopción será afectada por la cultura, gobernada por la política y afectada por los desarrollos comerciales.
10. Desafío de la viabilidad
Ante una expectativa de crecimiento limitado de la economía argentina aumenta el desafío de establecer prioridades para el uso de los recursos financieros del Estado, ajustando las pretensiones de crecimiento y orientación de las inversiones.
11. Adaptación a las reglas basadas en el sistema internacional
El orden internacional cambiante genera nuevas prácticas y normas que en sí mismas no siempre son identificadas como de interés estratégico para fortalecer la gobernanza nacional. Hay un aumento de la demanda orientada a que la gestión de gobierno entienda el rol de Argentina en el concierto global, acepte la realidad, y adapte sus decisiones, para ganar libertad de acción y promover el desarrollo, minimizando el riesgo político que producen las decisiones de gobierno.
12. Aumento de la competencia por los bienes comunes globales
El crecimiento de la población global y la calidad de vida, aumentan progresivamente la dependencia y competencia por los bienes comunes globales y la demanda de mejora de la gobernanza internacional y nacional para asegurar el acceso y explotación presente y futura. Es relevante el entorno marítimo por los intereses argentinos en el mar y la Antártida como espacios de interés estratégico donde persiste el conflicto con el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte por las Islas Malvinas, Georgias y Sandwich del Sur y sus aguas correspondientes, que suponen el treinta y tres por ciento del área de jurisdicción nacional, afectando la explotación de recursos, la protección de activos estratégicos en el entorno marítimo y la conexión con Antártida.
13. Aumento del ámbito de competencia internacional
La mayor competencia entre estados y otros actores como consecuencia de cambios en el balance de poder internacional permiten visualizar la expansión del ámbito donde se manifiesta esa competencia y el incremento de conflictos intraestatales con un límite difuso entre guerra y paz y la creciente demanda de alianzas duraderas, con particular relevancia del entorno marítimo y antártico por el aumento de las jurisdicciones estatales en el mar y el conflicto con el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte. Es un desafío para la gobernanza adaptar los conceptos, las normas y prácticas para la defensa nacional.